CAPITULO 12
Estaba totalmente decepcionada de la actitud de Luca, tal vez lo estaba idealizando, me había dejado deslumbrar por su apariencia y su supuesta madurez, pero el hecho de que reaccionara de esta forma ante los sentimientos de Kat era inaceptable para mí, acaso Ruth no pensaría lo mismo, ella que fue victima de la incomprensión de su padre. Quizás era hereditaria esa conducta irracional. Estaba muy molesta con él, me veía a mí misma en la situación de Kat, si tan solo pudiera hacer algo para ayudarla, pero ni siquiera abrió su puerta, y la comprendo en verdad, ella necesitaba llorar y estar sola. Mañana hablaría con ella, juntas encontraríamos una solución y si era necesario hablar personalmente con Luca, lo haría, enfrentaría su furia y resolveríamos esta situación.
Baje muy temprano a la cocina, en ella se encontraban ya Ruth, María y Kat. Sentadas en la mesa con sus respectivas tazas de té. Se notaba que había pasado la noche en vela, yo misma no había podido conciliar el sueño pensando en el día de hoy y lo que vendría con él.
Hija, debiste confiar en mí, te pusiste en un verdadero peligro- le decía Ruth con la voz más tranquila que podía usar.
Así es chiquilla, Luca tiene razón, se que ahora no lo comprendes, pero con el tiempo veras que es verdad- María apoyaba siempre a Ruth, eran un frente firme ante cualquier situación.
Yo estaba boquiabierta, oculta tras la puerta de entrada para no interrumpir la plática, como era posible que Ruth no apoyara a su hija, después de lo que ella vivió, sí tuvo un final feliz, pero ¿y si no hubiera sido así? Y el hecho de que funciono para ella, no quería decir que pasaría igual con Kat, tal vez este chico si era el amor de su vida. Me di la vuelta y regrese a mi habitación, tendría que buscar la oportunidad de hablar a solas con Kat, que ella supiera que no estaba sola contra el mundo, que me tenía a mí sí me necesitaba.
Daba de vueltas por mi cuarto, con tantos pensamientos en mi cabeza, hacia mucho tiempo que un hombre no me hacía enojar tanto, ¿por qué Luca no podía ser más razonable, por qué no podía escuchar a su hermanita?. Parecían ser la familia perfecta pero tal vez no lo eran en realidad.
Salí al balcón y vi a Luca que se dirigía hacia el establo, y en un arranque de valor atravesé la puerta de mi alcoba con la fija idea de encararlo. Sí nadie en esta familia iba a apoyar a Kat yo lo haría y él tendría que escucharme, aunque no me correspondiera a mí por lazos sanguíneos hablar con él, lo haría por que sabía muy bien lo que era vivir una separación y lo mucho que tu vida queda marcada por no tener apoyo de ninguna persona, si después él me echaba de su casa tomaría mis cosas y me iría, pero con la conciencia tranquila.
Luca ¿estas aquí?- el establo era muy grande y tenía muchos caballos- ¿puedo hablar contigo un momento?- mis manos temblaban.
¿Qué necesitas Candy?- Luca salió de uno de los corrales donde le daba de comer a su caballo, el mismo que monto ayer, era evidente que había pasado mala noche como todos los demás, su tono era seco y más frio de lo que quise percibir, esto definitivamente no sería agradable.
Se que no me corresponde, pero creo que estas siendo muy injusto con Kat, si tan solo la escucharas y les dieras la oportunidad...
¿Qué estas diciendo Candy?- se acercó más a mí- ¿Sabes acaso quién es el pretendiente de Kat, el supuesto chico enamorado? Espero que lo sepas ya que estas aquí abogando por un amor juvenil, como si yo fuera el villano de la historia, el malvado y resentido que no quiere la felicidad de su hermanita menor- cerro los puños, lleno de impotencia.
¡No, no lo sé!, pero lo que si sé es que ella es una chica que necesita comprensión, necesita que la guíes y la apoyes, yo se muy bien que no tengo derecho, pero también se lo que es tener un amor y verlo perdido por que las personas no lo aprueban, créeme será algo que la cambiara para siempre- dije con los ojos llenos de lágrimas, después de todo esto tocaba fibras muy sensibles en mí.
Candy, no tengo porque darte explicaciones de mis actos, ella es mi hermana y la amó. No me conoces para nada- dio la media vuelta en señal de que había terminado la conversación, pero yo no estaba dispuesta a rendirme tan pronto, no sin pelear por Kat.
No dudo que la ames o que tus intenciones son buenas, pero ¿Qué puede tener este chico de malo? No logro entenderlo, ¿es pobre? Es eso... no creía que fueras de ese tipo de personas..
¡Tiene cuarenta años Candy!, ¡tiene esposa y dos hijos! Y ha estado seduciendo a mi hermanita con la idea de llevársela, ¿para qué? Supongo que para lo peor- se calmo un poco, yo estaba impactada, de todas las cosas que mi cabeza había imaginado jamás pensé que esta fuera la razón.
Luca, lo lamento no lo sabía, Kat hace poco me hablo de un "chico" un pretendiente que tú no aprobarías, pero ... te juro que no sabía nada.- estaba super apenada, ¿por qué había tomado la decisión de entrometerme sin saber la verdad?
Ayer después de que salí de casa en busca de Kat, no sabía a donde dirigirme, Candy me encontraba desesperado, yo soy responsable de Kat, llegue a casa de su amiga Rosa y tuve que hacer que sus padres la obligaran a decírmelo todo, ella me habló de este tipo de donde y como conoció a mi hermana, ella llevaba meses ayudando a Kat para que se vieran a escondidas, y ayer estuvieron a punto de fugarse, casi no alcanzo el barco en el que se irían, subí a Katrina a empujones al coche y a este tipo le destroce la cara- se notaba su furia al recordarlo- le dije que si él no subía a ese barco y desaparecía de nuestras vidas, no habría lugar en el mundo donde pudiera esconderse de mí- se notaba que no mentía al respecto.
Luca, perdóname por favor- lloraba por mi error y por la desgracia que pudo haber pasado si Luca no hubiera llegado a tiempo, Kat era una niña dulce y era verdad lo que escuche decir a Ruth, estaba en verdadero peligro.
No soy un hombre perfecto Candy, pero amo a esta familia más que nada en este mundo y no dejare que nada los lastime y si de eso resulta que Kat me odie estoy dispuesto a vivir con eso.
Lo abrace fuerte y correspondió mi abrazo.
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inmensamente feliz
Fiksi PenggemarCandy estaba segura que el amor de Terry era incondiconal, pero ¿lo era?. Los derechos de los personajes de la serie Candy Candy son de su autora Nagita Keiko.