🔥CAPITULO 47🔥

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SIN EDITAR.

🥵<<{Nathan}>>🥵

Todos estamos sentados frente a un café y una montaña de galletas con frutos rojos que nadie come excepto por supuesto mi hermano y lo entiendo, todos atravesamos las situaciones de diferentes maneras, él en cualquier situación, cualquiera, la pasa comiendo.

Klaus: Mamá hay algo que debes saber.

Señora: Eso puede esperar, hay visitas.

Andrei: Señora, es mejor que escuche a su hijo, lo que tiene que decirle es mucho más importante que nosotros.

Ella sonríe por alguna razón que no entiendo luciendo tan entusiasmada como mi hermana en cada desfile.

Daría mi vida por poder estar otra vez en esos desfiles y ver su radiante sonrisa.

Señora: ¿Conseguiste novia? ¿Te vas a casar? Sabía que mi hijo encontraría una mujer que me daría unos nietos guapos.

No es por la señora, pero sus palabras clavan una estaca en mi pecho, yo tendría hijos hermosos si su hijo no se hubiera atravesado en el camino de mi mujer.

No, yo tendré hijos hermosos, ellos van a sobrevivir y eso solo será una jodida y oscura etapa de nuestras vidas.

Klaus: No mamá, lo que tengo que decirte es muy serio y tiene que ver con Edgar.

Señora: Sabes que no me gusta hablar de él.

Ladeo la cabeza mirando a Klaus.

Klaus: Hace años que no se hablan.

Señora: Y en lo que a mí respecta seguirá así.

Klaus: Mamá esto es grave, lo que Edgar hizo lo es.

Señora: No me interesa, no me hables.

Nathan: Señora no quiero ser irrespetuoso porque mis padres no me educaron así, pero tengo atoradas muchas palabras que no le gustarán y saldrán de mi boca si no deja hablar a su hijo.

Todo bien con la señora, pero es desesperante.

Sin Agnes ya no hay ganas de fingir ser el niño bueno de siempre.

Klaus: Mamá, Edgar intentó abusar sexualmente de una mujer embarazada —la señora se tapa la boca con ambas manos jadeando, pero no hay rastros de asombro en sus ojos— ella está muy grave, la apuñaló cuando intentó defenderse.

No lo intento, lo logró en cierto modo, por lo que me comentó Jason mientras intentábamos pasar el tiempo hasta que las noticias de lo que le pasaba a mi mujer salieran es que la encontró mientras lo ahorcaba con las cadenas en su cuello, al parecer lo último que pudo decir fue que espero por él como se lo había prometido antes de que él la dejara ir a la visita.

Señora: Pobre niña, ¿Podemos hacer algo para ayudarla?

Nathan: Señora por qué no parece tan sorprendida.

La señora se pone de pie y empieza a limpiar la mesa como excusa mientras susurra que irá a buscar más galletas.

Klaus: ¿Qué me estás ocultando mamá?

Nathan: Sabía cosas sobre su hijo, ¿Qué sabía?

Klaus: Habla mamá.

La señora suspira derrotada y se vuelve a sentar, gruesas lágrimas caen de sus ojos hacia sus mejillas mientras agarra la mano de su hijo y lo mira con lástima.

Señora: ¿Sabes por qué no hablo con tu hermano?

Klaus: Él me dijo que tú no lo querías cerca de mi porque no te gustaba su trabajo.

Ella niega.

Señora: Discutimos porque vi actitudes hacia ti que no me gustaban.

Klaus: ¿De qué hablas? Siempre fue normal conmigo.

Señora: Lo encontré poniendo algo en el té que siempre tomas antes de dormir, cuando te fui a ver esa noche tu no despertabas y Edgar, él…

Klaus: ¿Él que mamá?

Nathan: Dejala asimilar sus palabras Klaus.

Si es lo que me imagino necesitará mucho tiempo para asimilarlo.

Señora: Él solo estaba en bóxer, estaba tocando tu espalda, te… te beso el cuello y la mejilla, no podía creer lo que tu propio hermano te estaba haciendo, ni imaginar cuántas veces había pasado eso o si había pasado mucho más antes de que me diera cuenta.

Klaus: ¿Qué?

Se levanta exaltado y se mira así mismo con asco, siente asco de sí mismo aunque él no supiera nada y no haya hecho nada.

Klaus: Mentira, si eso tiene que ser una mentira.

Da vueltas divagando mientras su madre llora y solloza con sus manos en el rostro.

Nolan: Klaus.

Se detiene y nos mira.

Nathan: Mirala, esa es la mujer que te dio a luz, ella no te mentiría con algo así.

Klaus: No puede ser, ella tiene que haber malinterpretado todo, es… no puede ser…

Se sienta en el suelo y lleva sus manos a su  cabello mientras mira el suelo perdido en sus pensamientos, me levantó aunque no me corresponda a mí apoyarlo en este momento y me acerco a él.

Nathan: ¿No crees que es capaz de hacer algo así?

Klaus: Es solo que… él, él siempre fue la persona más importante para mí, era mi ejemplo a seguir.

Nathan: No creo que te guste mucho seguir ese ejemplo, te aseguro que es mas gratificante tener sexo con consentimiento que sin el.

Señora: Perdóname Klaus, cuando todo pasó no quería que sufrieras por eso no te dije nada, no quería que seas un niño herido.

Klaus: ¿Es mejor ahora? ¿Se supone que es mejor? Sabes la cantidad de veces que me he quedado a dormir en su casa y me ha dado el mismo té cada maldita noche, ¿Como se supone que sepa si no me ha drogado cada noche que estuve a su lado?

Bueno, el enojo es un sentimiento agradable, ese si lo puedo entender.

Señora: Te dije que no hables con él, que no lo veas.

Klaus: ¡Pensé que se pelearon por una estupidez! ¿¡Cómo voy siquiera a imaginar una cosa así!?

Saco mi teléfono del bolsillo cuando vibra y veo el mensaje que me acaba de llegar con una siniestra sonrisa antes de levantarme y mirar a los chicos.

Nathan: Tenemos que irnos, lo encontré.

Todos asienten.

Nolan: Señora fue un placer conocerla, si no le molesta me llevaré algunas de éstas para el camino.

Se pone muchas galletas en los bolsillos mientras le sonríe a la señora.

A veces se supera.

Empezamos a salir de a uno murmurando un adiós, soy el último en salir, pero antes de hacerlo me giro y veo con una media sonrisa en el rostro como Klaus se levanta del suelo con los ojos enrojecidos.

Klaus: Voy con ustedes.

Sabía que lo haría.

Agnes. 6°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora