Lágrimas de estrellas, Corazón de piedra

Ironía musical

Las vacaciones de verano recién habían comenzado. El hijo del carnero estaba en su habitación, como de costumbre estaba tocando el violín, sin embargo una llamada interrumpió su momento de concentración.

Al inicio Tubbo se molestó, pero el solo ver el contacto le regresó su alegría, era la señorita Sally quien le hablaba.

-¡Maestra!- grita el menor entusiasmado, su maestra sonríe al otro lado del teléfono, el carnero solo escucha las risas de su profesora.

-¿Qué tal estás Toby? ¿Listo para ir a Europa?- Pregunta la maestra mientras se prepara una ensalada. El jovencito sabía que quería ir a otro continente para probar lo bueno que era en la música, pero afirmar que estaba listo era mucho decir.

-Pues...- dice algo nervioso el chico con cuernos. -¡Estoy entusiasmado!- continuó el jóven.

Sally sabía que era difícil irse a otro lugar para empezar de nuevo o mejorar tu vida, eso lo aprendió ella tanto en su vida como en la de otros.

Tubbo y su profesora no eran los únicos teniendo una llamada. Minx estaba al teléfono con su jefe. El hombre le había dejado un encargo importante a la pelimorada, crear y supervisar el decorado de una área de futuros casinos en Las Vegas.

Aquella oportunidad era algo especial, una gran cantidad por un trabajo nada fuera de lo común, sonaba como una especie de "oferta", no obstante había una condición.

Minx debía estar allí durante al menos dos semanas, la estadía no era problema, algún amigo le podría dar hospedaje por una cantidad "x" de dinero, lo que le preocupaba era Tubbo.

Minx sabía que su hijo tendría una presentación cerca, Sally les comentó a ambos de un concierto al que irán jueces de la academia europea. Minx sabía que aquel día sería una fecha importante en la carrera de Tubbo, pero para él habrían más fechas, así que decidió ser algo egoísta y prefirió poner sus ganancias sobre un concierto, después de todo Sally ya había seleccionado al carnero, así que no habría mucho problema en que faltase a un solo concierto.

Volviendo a Sally, la mujer le explicaba a su alumno favorito cuándo, cómo y dónde sería el concierto, además de lo que buscaban los cazatalentos de aquella academia extranjera. Tubbo se se sentía lo suficientemente seguro de sus habilidades para un concierto normal, uno dónde están sus amigos, su familia, algo natural, pero le daba miedo que los invitados de los invitados de Europa no le vieran potencial.

.Mira Toby- dice la pelirroja -Eres de mis mejores alumnos de esta generación, puedes entrar fácilmente entre los 10 mejores alumnos que he tenido, así que si yo fuera tú, solo practicaría, después de todo eso es lo único que puedes hacer, o dime ¿De qué te sirve estresarte por algo que no controlas?- El carnero lo pensó un momento, su maestra tenía razón.

El peli café terminó la llamada y tomó su violín, estaba listo para empezar a practicar.

-Y uno, dos y tres ¡y va!- El metrónomo sonaba, Tubbo practicaba en su violín una nueva canción, debía aprender Clair De Lune para un concierto que venía. La señorita Sally lo había nominado como violín principal, nada nuevo.

A media práctica la puerta de su habitación empieza a sonar, por lo que Tubbo debía detener su pequeño concierto para abrir la puerta a su madre.

La mujer de cabello oscuro entra a la habitación y toma una maleta, luego empieza a meter cosas al azar, el jovencito se queda confundido, por lo que decide preguntar qué era lo qué pasaba.

-Tengo un viaje de negocios de dos semanas a partir de mañana, te dejaré con tu papá hoy en la noche, tienes hasta las 7 para arreglar todo- El carnero seguía confundido, pero ahora también sentía una pequeña ansiedad mientras guardaba su metrónomo y su violín. Mientras guardaba sus cosas tuvo una duda.