Cuando llegamos al evento tuve la sensación de que alguien estaba siguiéndome en cada paso que daba, pensé que, de tanto miedo, me estaba volviendo paranoica, pero esta sensación no se va. Me estoy volviendo paranoica es un hecho. Miro a mí alrededor buscando algo que me haga darme cuenta que algo va mal, pero no veo nada, solo a quien choco conmigo ir al baño, su caminar parece al de una persona que ha bebido demás, pero sé qué no es el caso, tan solo unos minutos estuvo conmigo y con todo lo que pasa en mi vida, tengo miedo, ¿será ella mi acosador? ¿debería seguirla? Será mejor salir de dudas no importa si me pasa algo debo terminar con esto antes de volverme loca. Me dispongo a seguirla cuando Engfa se acerca a mí.
- ¿Estas bien?, ¿paso algo con la chica que te golpeo?
Al parecer a estado pendiente de mi esta noche, aun con todas las responsabilidades que tiene, aun así, siempre cuida de mí.
- No te preocupes, fue un accidente y todo está bien, solo creí ver a alguien conocido.
Trato de hacer como todos estos días, cada que ella me pregunta si estoy bien le digo que sí.
- Se que no estas bien, y sé que eso no fue un accidente.
No espera a que dijera eso y es aquí cuando algo me dice que ella a fingido creerme durante todo este tiempo que le he dicho que estoy bien.
- Vi todo y ella fue sobre ti, ¿es la persona que estuvo acosándote?
- No¡, digo solo olvídalo fue algo sin importancia.
- Tus acciones dicen lo contrario, estas muy tensa y nerviosa, si no me dirás que pasa iré yo misma a buscar respuestas.
No tengo tiempo a detenerla cuando ella va rumbo a los baños que es justo a donde la desconocida se fue, no lo pienso y sigo a Engfa, no puede pasarle nada malo. Al entrar al baño la imagen que me recibe me aterroriza, las manos de Engfa están llenas de sangre.
- Engfa, ¿Qué paso? Por favor dime que estas bien.
- Tranquila Char, la sangre no es mía.
Siento tranquilidad al escucharla decir eso, pero él miedo no abandona mi cuerpo.
- Si, en efecto es mía, tranquila.
A pesar de estar herida, dice las palabras con mucha calma y trata de bromear con la situación.
