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- En unos minutos vendrá una enfermera para guiarla a la habitación en la que la instalaremos.

- Muchas gracias doctor.

Siento como la tranquilidad vuelve a mí, mientras estoy en la espera de la enfermera vuelve a mi mente algo que dijo en el auto, ¿Por qué dijo que entendería el motivo de su herida? ¿será ella mi acosador? Pero ella dijo que no era una mala persona,

- ¿Quién confiesa ser una mala persona Charlotte?

He comenzado a hablar conmigo misma, en definitiva, estoy perdiendo la cordura. Debo tener respuestas a mis preguntas pronto, espero que hablar con ella me de algunas respuestas. Salgo de mis pensamientos cuando siento mi teléfono vibrar en mis manos, había olvidado que lo tenía conmigo. Cuando termine la llamada con el Señor Na, lo había puesto en vibración, había comenzado a sonar de manera constante, tengo muchos mensajes sin responder la mayoría de ellos son de Engfa, le responderé para que se quede tranquila, no puede estar preocupada por algo más, solo debe enfocarse en los compromisos que tiene pendientes esta noche, además debe descansar.

- ¿Como esta ella? Envíame la dirección del hospital en el que están llegare al salir de aquí.

- Charlotte. Estoy muy preocupada pasaron horas desde que te fuiste.

- Charlotte. Por favor dime que estas bien, estoy realmente preocupada por ti.

- Tranquila, todo está bien, recién veo el móvil.

- No tienes que venir, dentro de poco llegare al hotel, trata de descansar por favor. Debes cuidar tu salud, estos días no has dormido mucho.

- Estaba por ir al hospital, le pregunte al chofer donde fue que te llevo, me llevaría con el cuándo fuera a traerte.

- No lo hagas, ya en un momento vendrán por mí iré directo a ti, si prefieres me esperas en mi habitación, hablamos cuando llegue, pasare a verla antes de irme, así me quedo tranquila.

- Confiare en tu palabra, te esperare en tu habitación.

- Está bien, nos vemos en un rato más. Gracias por cuidar de mí.

NO TE QUIERO PERDERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora