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Leonardo Lewis

Después de haber llegado de la casa de mi madre, ya que ella debía de hacer unas cosas, aunque no supe con exactitud que cosas, porque no quiso decirme nada al respecto, al llegar y entrar, noté inmediatamente lo silencioso que se encontraba, así como al subir las escaleras puedo percibir a la perfección el aroma del perfume de Marinette, aunque eso sería algo imposible.

O eso es lo que pienso, pero al entrar a mi habitación, también puedo percibirlo, aunque con más intensidad.

Pero decido no tomarle mucha importancia y después de leer la nota que me dejó mi hermana, me quitó la camisa y me acuesto en mi cama, pero escuchó mi teléfono sonando, por lo que decido contestar.

Grave error.

—¿Hola?

—Soy yo Lewis ¿acaso me has olvidado? —escuchó su tono de voz sarcástico.

—Ah, eres tú —respondí sin mucha emoción.

—Sí, bobo. ¿Quién más sería, sino? —preguntó ella con burla. —Oye, Leo. ¿Será que hoy podríamos vernos?

—¿Vernos ahorita mismo? Lo siento no puedo. —respondí inmediatamente.

—¿No puedes o no quieres? Sabés que es por algo importante ¿no?

—No me importa, ya te dije que no puedo verte.

—¿Cómo qué no? ¿Al menos ya has avanzado con lo que piensas hacer?

—Ya sabes que aún estoy en eso.

—Sabés perfectamente que es realmente necesario que avances y rápido.

—Sí, ajá.

—Leonardo, te lo digo muy enserio. Me llamas cuando todo esté listo.

—Yo te llamó.

Y colgué sin esperar una respuesta de su parte.

Salí de mi habitación para ir a la cocina para prepararme algo para cenar y mientras bajaba las escaleras me puse a pensar, como siempre suelo hacer en momentos en los que me encontraba solo.

La mejor amiga de mi hermana si que era muy... insistente. Sí, quizá le queda bien esa definición, aunque no tanto como me satisfacería.

Laura se había enamorado tontamente de mí, yo la rechace, no era algo de mí que le aceptará y que luego le haría daño, no, por supuesto que no, mucho menos a la mejor amiga de mi hermana, quería todo lo bueno tanto para ella como para mí mamá.

Aunque también estaban Vanessa y mi medio hermano, lo debo de admitir, tener un hermano menor no estaba tan mal, además la llegada de Vanessa a la vida de mi papá, fue lo mejor que le pudo pasar, lo que me alegra mucho por él, si soy sincero.

La única razón por la cual Laura me ayuda con mis planes con Marinette es porque, puede que le mintiera un poco.

Le dije que si me ayudaba, podría considerar tener una relación con ella y como está muy cegada por lo que siente por mí, no lo dudo ni un segundo al aceptar. Laura me era muy útil, era muy buena para hackear camaras de seguridad, así como cualquier artefacto tecnológico.

Desconocía como es que ella sabía hacer todo eso y como lo había aprendido, solamente sabía que al momento de realizar mi plan, ella sería de mucha ayuda para encubrir ciertas cosas y así no ser descubierto.

Al llegar a la cocina me di cuenta que la comida ya estaba preparada, así que solamente me servi un poco y me dirigí a la sala de estar y me senté ahí, mientras prendí el televisor.

Por una traición [Ninette]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora