Sister [Las Joyas de la Princesa]

Sister

"Tomaste una responsabilidad que no te correspondía, y siempre estaré agradecido de que fueras tú"

Haveron y Kamal-.

Betsabé se escabulló del palacio de la primera concubina para conocer a su hermano recién nacido, Haveron, su madre estaba furiosa y la Emperatriz también estaba tensa, pero ignoro completamente el ambiente que había en los palacios y fue a visitarlo, la segunda concubina se encontraba dormida y se sorprendió por la casi nula seguridad que tenía ella y su hermanito, fue muy fácil llegar a la cuna de Haveron.

Toco la mejilla enrojecida de su hermano, suave.

Sonríe.

"Hola" murmuró encantada, es solo una pequeña y dulce niña feliz de tener un hermano "Prometo cuidarte, Haveron".

Su dedo fue atrapado por la manita del pequeño girasol.

Fue la primera en sostener a su hermanito, su madre grito que se lo llevaran, que lo mantuvieran fuera de su vista, así que ella tuvo que hacerse cargo de Kamal hasta que recuperará la razón, recibió ayuda de una anciana partera que le indico como darle la leche, cambiarle el pañal, bañarlo y vestirlo, estuvo los primeros tres meses de vida de su hermanito cuidándolo, porque Benela todavía no podía verlo, Haveron los visitaba a escondidas, extrañado y triste por la falta de visitas de Betsabé al palacio de los girasoles.

Haveron mira a Kamal en los brazos de Betsabé durmiendo aferrándose a un mechón de cabello de su hermana.

"¿o ela ashi?"

"¿A que te refieres, Haveron?"

Apunto al dormido Kamal y Betsabé ríe.

"También te dormías en mis brazos, pero tu te aferrabas a mi ropa".

Ahora está más tranquilo.

Kamal se despierta y se remueve sacando sus manitas para tocar el rostro de su hermana.

Su madre se había ido a hacer caridad y lo dejo en el palacio para su seguridad, observa a la servidumbre pasar de él y mirarlo en ocasiones de manera hostil, cansado de eso se escapo para ir a visitar a su hermana, sabiendo que a está hora debe estar en la cocina haciendo postres para Kamal. Los guardias ven al joven príncipe dirigirse al palacio de la rosa roja, acostumbrados lo dejan pasar, el pequeño se escabulle y abre la puerta trasera de la cocina, ve a su hermana usando un delantal rosado pálido.