Una pareja deciden dar un paso más a su relación, así que se van ha vivir juntos a un pequeño departamento con sus mascotas. Pero los únicos enamorados no es la pareja humana.
-¿Donde dejo esta caja Shoko?- pregunto un joven de cabellera negra mientras cargaba una caja de cartón llenas de partencias femeninas.
- Oh... déjalo en el suelo de la sala - contesto la mencionada mientras organizaba el mueble de la sala con los libros de medicina y los discos de música de su pareja.
- Okay - dejo la caja - Iré al auto por las de más cosas - salió del departamento solo recibiendo una confirmación de la chica que seguía desempacando las partencias de ambos.
Shoko y Suguro son una joven pareja que lleva 3 años de relación de noviazgo decidieron avanzar en su relación, tomando la idea de vivir juntos en un departamento. Ambos cursan el ultimo año de sus carreras respectivamente, él de ingeniería industrial y ella medicina. Ellos se conocieron en la universidad, en un café donde ella trabaja como mesera y él iba de vez en cuando a tocar o comer los fines de semana. Se acercaron simplemente porque Geto por accidente con su guitarra pego la charola de servicio tirando sus pedidos de Shoko. Obviamente él pago todo, he empezaron hablar y así empezó ahora 3 años después estaban viviendo juntos en ese departamento en un pequeño suburbio de Tokio.
Se llevaron todo el día para sacar todas sus pertenencias y acomodarlas, así que decidieron dormir y mañana terminar y traer a sus mascotas a su nuevo hogar. Sí, la chica como el chico son fanáticos de los animales, más específicamente de los gatos. La joven toda su vida desde su infancia su familia siempre tenia como mascota un gato, es por eso el cariño de estos animales, hace unos 3 meses atrás fue su cumpleaños y sus padres le regalaron un gato de la raza maine coon, un hermoso gato macho con pelaje largo de color blanco con ojos celestes, lo llamo Satoru. Mientras que Geto tenia una gatita que adoptó hace 2 meses, la recogió de la calle, una gatita bombay que la bautizo con el nombre de Utahime.
El siguiente día terminaron todo lo de la mudanza a si que trajeron a sus mascotas al departamento para que estos se conocieran. Shoko estaba en el departamento con su gatito mientras cocinaba para la cena. Ella vivía en una cuadra de su nueva vivienda a si que pudo tráelo de una manera más rápida mientras agradecía a su vecina por cuidarlo he entregar las lleves del departamento.
Meow
Escucho el maullido del gatito exigiendo comida, ella volteo a ver su tazón ya vacío. - No puede ser Satoru, hace 10 minutos te di de comer ,- lo vio y este solo la miraba con sus lindos ojos celestes para convencerla que le diera un poco de salmón - Si que eres persuasivo - tomo unos trozos de salmón y se dirigió a su tazón. El gatito solo la siguió contento de ganar su cometido. La castaña le sirvió y él empezó a comer. - Si que eres un gatito glotón y con gustos caros -lo miraba como comida enternecida - Me dejaras en la quiebra, espero que Utahime no sea tan glotona como tú - un pensamiento que la preocupó llego a su cabeza y regreso a ver al techo un poco estresada --- Si fuera así nuestros salarios se irían en ustedes y no en la renta. El gatito albino solo se dedicaba a comer, no le preocupaba de eso, él no se consideraba un gatito exigente con solo tener comida en su tazón, la atención de su dueña, gafas, juguetes, limpió, pelaje sedoso y su caja de arena limpia era suficiente.
- Llegamos - la voz de un joven y la puerta abriendo se escucho.
Ambos regresaron a ver a la puerta de entrada.
- Bienvenidos.
- Mira te presento a Utahime.
Una gatita de pelaje negros brilloso grandes ojos avellana con un lindo moño blanco en su cuello siendo cargada por el joven. Esa linda criatura los cautivo.
- ¡Oh! ¡Eres muy linda Utahime! - la castaña se acerco para acariciar a la gatita.
Que se dejó sin problema.
Satoru solo miraba desde su posición a la gatita, levemente más pequeña que él. Esta muy curioso, quería verla más de seca es por eso que se acerco a la pareja que platicaba de su día de dejar todo listo por la mudanza.
"Cosas estúpidas"
El minino se puso entre las piernas de su dueña y empezó a tallar mientras maulla por su atención y que le presente a la gatita de nombre Utahime que ahora era cargada por Shoko.
- ¿Oh?... - dejo de hablar Geto y regreso a ver al suelo donde estaba el gato - Oh, hola Satoru - se agacho para acariciar su cabeza - Sí que has crecido mucho.
"¡Eww! No quiero verte a ti, quiero ver a la bola de pelo negro"
Él solo giro su cabeza a la dirección de Utahime mientras maúlla. Ella lo miraba curiosa y extrañada.
"¿Tiene gafas?"
- Ya veo - Suguro se levantó y pidió a Utahime para presentarla - Satoru ella es Utahime - la bajo al suelo.
Ellos se vieron frente a frente. Él miró una linda cara redonda con orejas largas redondeadas, grandes ojos avellana y un lindo pelaje negro brilloso como el charol. Ella miró un gatito con mucho pelaje de color blanco, ojos celestes cubiertas levemente por unas gafas de sol y de un tamaño levemente más grande que ella.
"Es muy linda"
"Parece un erizo"
- Serán amigos - Shoko se agacho a la altura para ver su interacción.
Porque tan pronto se vieron su gatito se acerco cariñoso a la gatita con ganas de jugar con ella y ella no lo rechazo, acepto su solicitud. Los dueños se miraron encantados de ver que se llevarán bien, estaban felices y emocionados de su nueva vida en ese departamento. . . . . Anexo
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Cachorro de maine coon (Satoru)
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