Estrella

14 3 0
                                    

La luna es admirada por las estrellas, las estrellas no podían ser más magníficas que la luna.

La luna es admirada por las estrellas, las estrellas no podían ser más magníficas que la luna

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Él era la única estrella en el cielo sin brillo, la que parpadeaba intentando iluminar. La única con una falla.

Inocente, pero perturbado. Como una flor enferma.

El teñido jugaba como un niño rodeado de enfermos, encerrado por su salud mental. Pero él no notaba la diferencia entre su hogar y un loquero, en el loquero al menos sus amigos eran reales.

一 ¿Cómo va tu primer día? 一 Interrumpe una dulce voz femenina. Sebastián ni siquiera volteó 一 Juan Sebastián 一 Lo llama en un tono más alto, solo ahí el paciente despertó.

Trastorno de ensoñación excesiva. La bala de su buena vida.

Sebastián Carrasco pasaba desconectado de la realidad, hasta el punto de parecer no tener conciencia de su alrededor, volviéndolo peligroso para sí mismo. Disfuncional.

'Se deja llevar por una sucesión casi siempre incoherente de imágenes y pensamientos dependientes de motivaciones afectivas más que del pensamiento lógico' Fue lo que sus padres leyeron por internet al no entender un carajo de la "jerga de doctor"

Pero cuál era su deseo, se preguntaban los más cercanos ¿Con qué fantaseaba tanto?

一 Hola... 一 Murmura evitando el contacto visual con la mayor, quién frunce el ceño. Apenas se entiende lo que quiere decir, la timidez funciona como bozal para Carrasco.

La mujer sonríe simulando haberlo escuchado y empieza la primera sesión.

一 ¿Qué es lo que te gusta? 一 Comenzó con la sutil interrogación, una pregunta casual e inofensiva que ayudaría a entrar en confianza. No esperaba obtener información útil como respuesta.

El paciente se giró y por fin sus miradas conectaron, fue efímero pero la determinación que existió en sus ojos hizo temblar a la experta.

一 Johan. Me gusta Johan.

Verán, Carrasco no era tímido, ni callado y mucho menos cómplice de un fugitivo acusado de feminicidio. No solía ser un loco en peligro de suicidarse en cuanto liberen sus manos. A Sebastián Carrasco un tal Johan lo enloqueció sin siquiera verlo.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 03 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

DOPAMINADonde viven las historias. Descúbrelo ahora