The walking dead y tu

Capítulo 22

Han pasado unos tres o cuatro meses desde que llegué a Woodbury, he ayudado en diferentes tareas para la comunidad, cómo administrar la comida, municiones y armas, mi relación con Merle ha ido mejorando de a poco.

Hoy por la tarde el gobernador junto a Merle y varios hombres salieron ya que vimos que un avión se estrelló a unos kilómetros de aquí, yo me quedé por que hace una semana me enfermé y dure varios días en cama, por órdenes del Gobernador no hice nada en ese tiempo.

En éstos momentos estoy preparando la cena ya que en lo que esperaba a Merle se hizo de noche, estaba tan concentrada que no oí como la puerta era abierta ni pasos acercarse a mí, solté un chillido cuando sentí que una mano era colocada en mi cintura, al girar mi cabeza vi que era Merle.

T/n: ya llegaste Merle.— dije mientras me daba la vuelta para darle un corto beso en los labios.

Merle: que haces afuera de la cama, no se supone que tenías que guardar reposo.— dijo colocando su mano y muñón en mi cintura.

T/n: ya me sentía mejor y no quería quedarme más tiempo en cama, cuéntame cómo les fué,  ¿encontraron a algún sobreviviente?.

Merle: en el helicóptero sólo quedó un sobreviviente y escondidas nos encontramos dos chicas, una de ellas la has de conocer, es la rubia de Atlanta.

T/n: ¿Andrea?.

Merle: si esa.

T/n: y dónde está?.

Merle: ahora en la enfermería, en unos minutos tengo que ir allá.

T/n: te puedo acompañar?.

Merle: no.

T/n: por favor, así aprovechamos para que la doctora me revise.

Merle: no vas a aceptar un no por respuesta.— yo negué con la cabeza.— está bien.

Yo solo me lance a abrazarlo.

T/n: gracias, solo deja que termine la comida y podemos ir.

El sólo dejó de abrazarme para ir a la habitación que compartimos, yo terminé de hacer una pasta por lo que lo tapé, me limpie las manos y me quite el mandil que tenía puesto, camine a la habitación para abrir la puerta y encontrarme a Merle acostado en la cama.

T/n: ya he terminado, ya podemos ir.

El solo se levantó y nos dirigimos a la puerta, al salir el cerro bien y comenzamos a caminar a la enfermería, al llegar Merle fue el primero en entrar.

Merle: vaya a ver a su paciente, doc.— habló mientras se acercaba a una silla.— apuesta que se estaban preguntando si yo era real, probablemente deseaban que no.

Mientras él hablaba con ellas yo seguí a la doctora al otro cuarto encontrándome al gobernador y a alguien en una camilla.

Gobernador: T/n ¿que haces aquí?, no se supone que debes guardar reposo.

T/n: buenas noches gobernador, Merle me dijo que vendría a la enfermería por lo que aproveche para venir con él y que la doctora me revisara.

La doctora dejó al paciente y me comenzó a revisar.

Doctora: ya te encuentres mejor, ya puede irse integrando a las tareas diarias.— le dijo al gobernador después de varios minutos.

Gobernador: que bueno porque necesito de tu ayuda.— se dirigió está vez hacía mi.— ya nos vamos doctora, cualquier cosa me avisa.

Esta vez los dos cruzamos la puerta para encontrarnos a los demás en la otra habitación, al salir el gobernador se acercó a decirle algo en el oído a Merle.