★ONE-SHOTS★

(008)

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El humo de aquel envuelto de nicotina lo hizo tranquilizar sus nervios, realmente necesitaba fingir que no necesitaba esto...

Fumo un poco más de aquella colilla para tirarle al suelo y pisarla como hizo varias veces con su orgullo ante quien decía que amaba... Vaya broma.

Seguía el sendero de letreros y música, en cuanto sus ojos vino fijaron su atención atrayente y libidinosa...

La vio tan hermosa aún con un poco de su labial corrido de lado, se suponía que al barrerle con su mirada, no notaría, como ella acomodaba elegantemente su sostén y las medias de encajé deslumbrantes a la vista de cualquiera que pasará por esa calle, ofreciendo la carne que era imaginada debajo de aquella poca ropa lujuriosa

Se acerco sin disimulo, inmediatamente un nudo que se formaba en su garganta lo atrapaba, pareciera que no admitía las ganas de perderse en sus ojos y en sus manos

Unas palabras más entre aquellas luces, no importo que aquella dama le sonriera con diversión cortésmente y con labia, tomo unos momentos más en dialogar y hacer que ambos se conocieran mejor, inesperadamente preguntándose...

Si en su mutua compañía habría un precio justo por calmar las ansías y el sufrimiento del otro durante la fría noche...

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-Haz que su nombre no me arda mas, dime qué me amas y que me estabas esperando, besa y muerde, luego mata está efímera pasión por tu lugar de escape...-

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No supo en que momento regocijaba su visita ante tal feminidad, el apego a su piel era exquisito y sucio

Poso sus manos y tacto donde quizo, tratando de ser lo más dulce posible, inconscientemente pretendía hacerle ver qué no debía guardar sus intenciones

Al momento de probarle no evito que su voz le excitara más de la cuenta, siguió con su juego retorcido sobre su piel

tantas lenguas que pasaron en aquel busto y tantos labios en tal rostro delicado, una vez más siendo despintado por la brusquedad de su calor y de su insistencia por borrar la memoria por quien se habría quitado la vida...

El movimiento escalo rápido y contundente, llenando de gemidos lascivos aquella parte de ese modesto café

Inhalo su aroma, ese perfume barato y del más corriente le hacía hacer muecas de encanto, aparentemente el toque de sus manos experimentadas por varios hombres hacían borrones en su recuerdo, por una vez en todo el mes deseaba otra carne...

Rogaba por un poco de atención, por enjuagar ese dolor que culminaba en su bragueta

Sus gritos no debían salir, debía demostrar valía por una vez más, hacer caso a su soberbia al percatarse de que ella se doblega a sus peticiones

Inconscientemente tratando de que se amarrara a su alma .... Solo por esa noche...

Rogando que después quizá de ello, no hubiera solo dinero por delante...

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El recuerdo de aquella que le dio todo y también le quito lo que era y lo que fue... No se hizo presente por unas horas en toda la noche de su dolor...

Un gemido salió de su pecho, al sentirse realizado por tanta maestría en esa boca, no podía creer que la necesidad de ser amado y de ser apreciado, iba a ser más fuerte que su pudor o su decencia

Un movimiento erotico lo suficientemente cálido como para volverle loco, mientras trataba de que las lágrimas no se derramaran...

que era esto?, su voz le decía cosas dulces pero su cuerpo demostraba amargura y total repugnancia y desespero entre la sangre que tomaba lugar en ambas mejillas

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-borra sus labios, borra sus caderas, borra su voz llamándome, necesito que tú figura le remplaze-

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El ojuelo que le formaba la mejilla al sonreírle, alargó el tramo de sus manos hacia su cartera entre abierta, le vio de nuevo acomodar sus atributos tan delicados y deliciosos, formando esa imagen expectante que le atrajo desde un principio, como lo hacía?

-guarda el cambio...-

Un acercamiento de ella al moreno, fijándose en su pelo obscuro y ondulado con ojos del color de bebida de uvas, pensó unos instantes, este hombre era curioso, si no fuera por lo desalineado que se observaba, debido a la acción de hace horas, podría jurar haberle visto antes...

Quizá en algún lado....

-no parece nuevo en esto...-

Dijo recordando sus palabras, aquel caballero de rostro refinado fue honesto, era su primera vez en este tipo de situaciones, pero al parecer emparejó su experiencia propia con lo que demostró hacerle sentir, era obvio que sabía cómo moverse...

Deshizo su interés de preguntar su nombre al momento de verle ansioso de irse, finalmente tomo la cantidad generosa de dinero y le vio pegar la vuelta a dónde había venido

Una pena que haya acabado, seguro tenía algo importante por decirle...

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