MARRY ME || TAYNICK || TAYLOR ZAKHAR & NICK GALITZINE ||

10- ¿Qué sientes?

NICK

Probablemente esta estaba siendo la cena más incómoda de toda mi vida.

Tenía a Taylor y Alan frente a mi; Alan hablándole a Taylor entre susurros al oído y entrelazando los dedos de las manos.

Me dolía verlo, no lo iba a negar, y sobre todo después del beso que nos habíamos dado hace menos de una hora.

El tema de conversación esta noche obviamente era la boda, y no era por que a alguno de los presentes le interesa el tema, si no por que Alan lo había sacado y no dejaba de hablar de todos los preparativos y de que estaban deseando que llegara el día.

Si el supiera todo lo que había pasado...

- Mañana es la prueba de menú - siguió hablando Alan - estamos deseando probar los platos.

- No se me ha dicho nada sobre la prueba de menú - me metí en la conversación - quedé con Taylor en que él diseñaria los platos.

- Taylor decidió no hacerlo - contestó Alan - quiere que alguien más se encargue de ello.

- ¿Y para que me sirve ayudaros con la boda si no me entero de las últimas decisiones que tomais?

- Lo siento Nick, tienes razón. Taylor y yo deberíamos haberte consultado todo.

Maldito falso y gilipollas.

- Entonces, Óliver y yo nos encargaremos mañana de buscar salones para la boda.

- Conozco unos que son perfectos - contestó Óliver - mañana te invito a desayunar y quedamos para verlos.

- Perfecto - le mostré una sonrisa.

Si Taylor seguía como si nada después del beso ¿por qué no seguir yo con mi vida y darme una oportunidad con Óliver?

- También hemos pensado en los lugares que ir para la luna de miel - Alan seguía hablando.

Levanté inmediatamente la vista de mi plato para mirar a Taylor. Una cosa era buscarle un salón de bodas y pensar que podría llegar a replantearse casarse con Alan, y otra cosa diferente era estar escuchando sobre sus planes de luna de miel.

- Tenemos pensado ir a las islas griegas - intervino Taylor.

¿Qué había dicho qué?

Ir a las islas griegas había sido siempre nuestro sueño. Viajar juntos y recorrer toda Grecia.

Definitivamente Taylor me estaba volviendo loco, por que hace menos de una hora me estaba besando y ahora seguía como si nada con todos los planes de la boda. Y no iba a jugar conmigo, eso lo tenía bastante claro.

- ¿Con que a las islas griegas no? - pregunté - ¿de quien ha sido la idea?

- De Taylor - contestó Alan.

- Lo imaginaba. Siempre ha sido el sueño de Taylor ir alguna vez. ¿Te ha contado que hace años ahorramos para ir juntos, pero que no pudo ser?

- No me ha dicho nada. Pero ahora ese sueño se va a cumplir - puso una mano encima de la de Taylor.

Y entre planes de boda, lunas de miel y alguna que otra mirada, la cena terminó y pasamos todos a salón para tomar un café.

Por razones obvias; Taylor se había sentado en uno de los sillones junto a Alan que no se despegaba de él, y frente a ellos, estábamos Óliver y yo hablando de cualquier cosa.

No era tonto para darme cuenta de que Óliver llevaba toda la noche lanzandome cumplidos, intentando rozar sus manos con las mías o simplemente hacerme reír. Y me gustaba, pero en mi cabeza estaba Taylor y el beso que nos habíamos dado esta noche. Un beso con ganas y sobre todo, que al menos a mi me había dejado con ganas de mucho más.