El rencuentro

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Dante

Han pasado exactamente dos años desde que comencé la búsqueda de esa joven que en ningún momento he podido sacar de mis pensamientos, recuerdo el olor de su perfume, suavidad de su piel, esos hermosos ojos azules, esos labios que recuerdo su sabor tan rico y me excita.

El pequeño gemido que escuche provoca que se me erice la piel.

Durante todo este tiempo mis ganas por esa joven no hacen más que crecer, cada vez que estoy con una mujer en mi mente, recuerdo a esa joven a esos hermosos pechos redondos que tiene, recuerdo su parte lo cálida y caliente que estaba.

Muero de ganas de hacerle todas las sucias que tengo en mente, hacerla gritar mi nombre.

Lo más raro es que en todo este tiempo no he podido encontrar mucha información de ella, eso es raro.

Solo sé que su nombre es Anabela y eso porque de niña asistió a una escuela religiosa.

He estado siguiendo a Francisco, ya que no he encontrado mucha información de ella, lo más conveniente es que él vaya a verla.

Escucho pasos acercándose a la puerta de mi despacho. Tocan la puerta, veo que es Álvaro, espero y traiga buenas noticias.

—Señor, tenemos la ubicación de la joven —Álvaro, se me acerca más a mi escritorio.

—Ya era hora de encontrarme con esa joven ¿Dime todo lo que has encontrado? ¿Dónde está? —estoy tan feliz de encontrarla, no soporto más este suspenso.

—La joven están en Francia, en un instituto privado, sabemos que está estudiando, tiene 20 años, pero lo más asombroso que hemos encontrado es que.... —Álvaro hace un momento de suspenso odio que haga eso.

Pero entonces, si tiene 20 años, cuando la bese tenía 18, eso me excita más.

—¿¡Dime de una puta vez que!? —mi tono de voz era de enojo.

—La joven es hija del señor Lauro, es hermana de Francisco —me quede un momento pensado en esa declaración que me acaban de dar.

—¿El señor Lauro tiene una hija? Ahora, entiendo por qué no había tanta información de ella, el hijo de puta la escondió. Bueno, no le sirvió de nada —en mi rostro estaba una gran sonrisa —Debemos de ir por ella de inmediato.

Me levanté de mi silla y me acerqué a la puerta, pero me interrumpe Álvaro.

—Espere señor, la joven se graduará en 2 días y tenemos entendido que ni su padre ni su hermano estarán —me quedó reflexionando en lo que me dice, tiene razón si voy por ella, ahora le podría dar oportunidad de escapar.

—Prepara todo en 2 días iremos por ella ningún día más —regreso a mi silla y me siento reflexiono en esa joven —En dos días serás mía.

Anabela

Hoy es un gran día para mí, es mi graduación, por fin me graduaré después de 2 años que me retrase por conflictos de mi padre, según él no quería arriesgarme.

Pero me da tristeza que en un momento de felicidad mi padre, mi hermano no estarán conmigo según ellos, porque alguien podría seguirlos y describirían que soy su hija.

Así que solo estaré con mis compañeros y mi mejor amiga Luisa.

Traigo mi uniforme de graduación puesto, debajo de él traigo un hermoso vestido de fiesta color rosa, aunque me arriesgue porque es muy corto.

Recuerda, no debes de agacharte y estarás bien.

Termina la ceremonia veo cómo mis compañeros están al lado de sus familiares.

Eres mi venganza y mi perdición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora