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Ese primer día Dahyun fue bastante indiferente con Momo, y aunque esta última le notificó a la señora Kim ella insistió en que solo era cuestión de tiempo.

A decir verdad, Momo comenzaba a sentirse incómoda, sentía que todo lucía muy forzado y tal vez esa era la razón por la que Dahyun no podía confiar en ella, pues su única interacción fue cuando hablaron en su habitación con respecto a la tarea de Dahyun, y el resto del día la menor simplemente se mantuvo ignorándola, después de eso ni siquiera le dedicó una mirada, nada.

No podía ser cierto que Momo fuera el tipo de Dahyun, al menos la japonesa no lo creía, pues Dahyun parecía no estar interesada en lo más mínimo y de cierta forma Momo se sentía ofendida.

Pero sus sentimientos no debían tener importancia, no cuando estaba ahí por dinero, así que tuvo que dejar su orgullo de lado y seguir intentando llamar la atención de la menor por los siguientes días, aún si eso significaba perder su completa dignidad debido a los tratos indiferentes de la menor.

Se sentía estúpida, pero necesitaba ese dinero, y a decir verdad, jamás se imaginó que ella misma estaría pisoteando su propio ego solo para llamar la atención de una mujer.

¿Cómo había llegado a ese punto? Ni siquiera se había humillado tanto por un hombre, ¿cómo podía hacer eso por una chica? Le parecía completamente irreal.

Sin embargo, ella ya tenía un trato con la madre de Dahyun y debía cumplirlo a costa de cualquier cosa, así que seguiría intentando.

Pero ya se había terminado esa semana, y aunque la señora Kim le pagó sin falta cada día, Momo se sentía algo frustrada, ni siquiera entendía porqué, debía estar feliz siempre y cuando recibiera dinero, y ahora estaba recibiendo el doble de lo que la cafetería le pagaba, pero ella era ambiciosa y quería ese bono final que la señora Kim le prometió, lo quería pronto y la actitud indiferente de Dahyun realmente no estaba ayudando, así que se lo había tomado como un reto personal, ella debía conquistar a Dahyun lo antes posible, no podía permitir que esa coreana siguiera pisoteando su ego de esa manera.

Mientras tanto en la mente de Dahyun, ella había encontrado a Momo realmente linda desde el primer momento que la vió, pero, no la conocía, así que no encontraba la manera de hablarle, y aunque la japonesa intentó hablarle varias veces a lo largo de la semana, ella simplemente no sabía continuar la plática, a decir verdad, Momo la intimidaba, era demasiado atractiva y Dahyun no se sentía lo suficientemente linda para impresionar a la japonesa.

Momo era completamente su tipo, tenía todo para hacerla perder la cabeza, además, había notado sus abdominales cuando la mayor limpió el polvo de la parte superior de un estante en su habitación y su camisa subió un poco debido a la posición, también notó que era bastante fuerte, podía cargar cosas con facilidad cuando las cambiaba de lugar para poder limpiar con mayor comodidad, y a decir verdad, los brazos flexionados de Momo y sus músculos tensos volvían a Dahyun realmente loca.

Pero no la conocía y era bastante tímida para dar un paso.

Así que aplicó la técnica de cortejo que siempre utilizaba.

No hacer nada y esperar a que la otra persona diera el primer paso.

Nunca le había funcionado, pero tal vez en esta ocasión sería diferente.

Y aunque Momo fue bastante amigable con ella desde el principio, Dahyun simplemente no pudo hacer nada al respecto.

Nunca había llegado tan lejos, su técnica nunca había tenido éxito, pero ahora Momo parecía realmente interesada en acercarse a ella y no supo cómo reaccionar.

Además, nada aseguraba que Momo estaba interesada en ella de la manera que esperaba, es decir, Momo lucía tan perfecta y Dahyun, bueno, ella no se sentía a la altura, además, tampoco sabía si a Momo le gustaban las chicas y no quería volver a ilusionarse creando ideas falsas en su cabeza cuando alguien solamente intentaba ser amable.

Entonces comenzó a ignorarla.

Excelente Dahyun, excelente.

La había estado evitado y tratado indiferente durante toda la semana porque tenía miedo de que Momo la conociera realmente y sintiera desagrado o repudio, pues Corea no tenía normalizadas a las personas homosexuales, así que le preocupaba que Momo pudiera notar que se había sentido atraída hacia ella y por consiguiente quisiera mantenerse alejada.

Además, nunca había sido buena para hacer amigos, todos la tachaban de rara y el hecho de que sus padres la mentuvieran aislada la mayor parte del tiempo simplemente empeoraba las cosas.

Pero Momo no tenía idea de lo que pasaba por la cabeza de la coreana, ni siquiera estaba segura de lo que Dahyun pensaba de ella, pero de lo que sí estaba segura era de que estaba cansada de limpiar todos los días esa casa, ese no fue el trato que hizo con la señora Kim, estaba cansada de prácticamente solo ir a limpiar sin hacer nada divertido, al menos le gustaba hacer cafés en su anterior empleo, pero ahora prácticamente había sido contratada para limpiar una casa todos los días, era cansado.

—Sinceramente no creo que podamos llegar a nada— Momo opinó al final del primer día de su segunda semana —Me gusta el dinero, sí, pero esto es una pérdida de tiempo, su hija ni siquiera me mira.

—Momo, eso es lo que ella quiere que creamos, no te des por vencida, yo sé que solo intenta persuadirme.

—¿Y qué con eso? Si así fuera es mejor dejarla tranquila, no es correcto intentar exponerla de esta manera.

—Momo, por favor, no hagas esto, te estoy pagando, solo deberías concentrarte en hacer lo que te digo— La señora Kim la reprendió —Un mes, intenta por un mes y si no encuentras nada fuera de lo común olvidamos todo esto, pero da lo mejor de tí si realmente quieres ese bono.

—¿Y por qué no intentar en otro lado? Tal vez nunca dará señales porque se siente vigilada aquí dentro.

—De ninguna manera, ella no saldrá sola de aquí, no sabe andar fuera por su propia cuenta, algo malo podría pasarle— La mujer exageró.

Y Momo tuvo que hacer su mayor esfuerzo por no demostrar lo irritada que se sintió.

—Entonces salga usted— Se atrevió a decir —Tal vez pueda ir a hacer las compras o simplemente salir con sus amigas, no lo sé, probablemente Dahyun se sienta menos vigilada y se suelte más cuando usted no esté.

—¿Y si algo sucede?— La mujer siguió pensando exageradamente.

—Nada malo le va a pasar solo porque usted no esté, ella ya está grande y yo estoy aquí, soy lo suficientemente independiente para cuidar de ella en su ausencia.

—No lo sé— La señora lo pensó por un momento.

—Piénselo bien, tal vez ahí esté la clave.

—Bueno, creo que puedo ir a hacer las compras del super mañana por la tarde, hay cosas que ya hacen falta en la casa— Comenzó a considerarlo la señora Kim.

Y Momo sonrió triunfante.

Incluso ella se sentiría menos presionada si la adulta no estaba ahí, tal vez era esa la verdadera razón por la que sentía que no podía acercarse tanto a Dahyun.

Conquista a mi hija || DahmoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora