Memorias del pasado

El Diario

Han pasado ya varios años desde que conocí aquella particular chica con orejas y cola semejantes a la de un "tanuki", que de alguna manera logró sacarme de la más profunda oscuridad y de alguna manera que desconozco, solucionar unos cuantos problemas que me atormentaban.

Se había ganado no solo mi confianza, si no mi corazón..

Naofumi: Rapthalia... llevamos buscando más de 2 horas... ya es muy tarde, ¿Podemos descansar?

Dije mientras miraba una estantería y ella buscaba en la otra.

Rapthalia: no... si lo buscamos mañana o mas tarde, seguramente encontrarás alguna excusa para no hacerlo y nunca encontraremos aquello que buscamos.

Ella ciertamente tenía razón, aún así no justificaba el hecho de que eran las 11 de la noche y aún seguíamos aquí.

Las horas pasaron y mientras buscábamos, encontré una vieja caja, con un contenido particular en ella.

Naofumi: oye, mira encontré algo interesante.

Abrí la caja mientras la escuchaba acercarse.

Rapthalia: ¿Encontraste lo que buscábamos?

Me preguntó, pero negué con la cabeza mientras limpiaba el exterior de la caja notando un particular símbolo.

Noafumi: No lo es, pero es algo más interesante.

Ella se acercó curiosa ante lo que había encontrado

Rapthalia: Entonces... ¿Qué es?

Saque una gran caja, que en su mayoría estaba llena de cuadernos viejos con algunos libros, mientras sacaba unos cuantos, que dejaron algo confusa a Rapthalia.

Rapthalia: ¿Un montón de libros y cuadernos viejos?
Naofumi: No, exactamente.

Dije, mientras ella se sentaba a mi lado y yo sacaba un pequeño cuaderno diferente al resto de aquella caja, lo cual dejo más confusa Rapthalia.

Rapthalia: ¿Qué es eso?
Naofumi: es mi diario...
Rapthalia: ¿Tu diario?
Naofumi: exactamente, lo escribí antes de conocerte.

La cola de ella se comenzó a mover con curiosidad, mientras le enseña aquel diario, ella no conocía mucho de mi antes de conocernos, supuse que tenia curiosidad de saber más detalles de mi vida.

Naofumi: ¿Quieres leer un poco?

Pregunté mientras lo abría.

Rapthalia: ¿Podemos?

Naofumi: claro, después de todo confío en tí.

Ella sonrió y se acercó a mí apoyando su cabeza en mi hombro.

Naofumi: Bueno, empecemos...

Día 47. Año: 13/2/2024

Ha pasado un tiempo... desde que mi vida se fue al barranco por culpa de mi única amiga, desde aquel día, mi grupo de amigos y toda las personas de la universidad me detestan, hasta intentaron sacarme de la universidad, pero por suerte parece que los profesores terminaron creyéndome y logré quedarme, aun que por supuesto, seguí siendo odiado y apartado de la sociedad.
Los días se hicieron monótonos, siempre era lo mismo, despertar, ir a la universidad, recibir maltrato por parte de mis compañeros, volver, cumplir con mis responsabilidades, dormir y repetir el ciclo hasta hoy.
Recientemente me he encontrado con alguien particular, en un callejón cercano a mi casa mientras regresaba del colegio, estaba ahí sentada, sin mirar a nadie oculta bajo una sabana sucia y rota, parecía tener unos 17-18 años y se notaba que había pasado por mucho, mientras caminaba cruzamos miradas por unos segundos, sentí algo de pena por ella, pero no podía hacer nada, así que simplemente pase de largo, aún así, sentí un extraño resentimiento por no haber actuado.