kuromi keychain [ jeongho ]

nueve (⁠◍⁠•⁠ᴗ⁠•⁠◍⁠)

—¿Minho? ¡Minho! —la voz de Hyunjin se oía lejana, como un sueño—. ¡Despierta, Minho!

Abrir los ojos le costó, como si doliera, como si se despertase luego de días. Lo primero que vió fue blanco; un techo blanco, luminoso y limpio. Su cabeza dolía y su cuerpo un poco también, se sentía extraño, como si no estuviese en su piel.

—¿Dónde… dónde estoy? —logró decir en un hilo de voz. Se sentía tan frágil, tan chiquito.

—Estamos en el hospital, Minho —escuchó decir la voz de Felix—, ya viene el doctor ¿Sí?

—¿Minho? —se oyó una tercera voz, desconocida, Minho tuvo que enfocar su vista para verlo—, soy el doctor Wang. ¿Cómo te sientes?

A decir verdad se sentía abrumado, aplastado, sentía como si se hundiera en la camilla. Como si la opresión que tenía en el pecho no lo dejase salir a la superficie a respirar.

—Me duele la cabeza —fue su corta respuesta.

—Es normal —dijo él—, sufriste un desmayo por estrés luego de un ataque de pánico, pero ya estás bien. Hicimos algunos análisis y no hay nada de qué preocuparse, voy a preparar tu alta y podrás irte en unas horas. Descansa mientras tanto.

El doctor se retiró y Minho vió mejor a su alrededor. Sus amigos estaban allí, con él. Sus caras de preocupación lo hacían sentir culpable, no se suponía que salieran así las cosas.

—¿Me desmayé? —Minho preguntó, aún los sucesos de las horas anteriores se veían borrosos.

—Sí, tuviste un ataque de pánico en el Hogar —contestó Changbin—, y luego te desmayaste. Minho ¿Qué pasó?

El Hogar, cierto. Estaban en el hogar tomando café y hablando con Sor Hyuna y Sor Yeji cuando… cuando todo se derrumbó.

—Yo… —su voz salió quebrada, estaba haciendo un esfuerzo sobrehumano para no dejar salir todas las lágrimas que necesitaba llorar—, lo siento.

Fue en vano, las lágrimas salieron de igual manera, de forma escandalosa, como si quisiera llorar los últimos dieciséis años sin su Nini. Sintió los brazos de sus amigos envolverlo, consolarlo, levantarlo para que no cayera.

—Minho… ¿Qué pasó exactamente? Puedes contarnos —Christopher habló, tomando su mano y dándole calma.

—Es que, no esperaba que estuviera muerto… —Minho sorbió por su nariz, hablando entrecortado por los espasmos del llanto.

—¿Quién está muerto? —Felix preguntó, confundido.

—Nini.

Vió como sus amigos se miraron entre ellos, sin entender de qué hablaba.

—¿De dónde sacaste que está muerto?

—Sor Hyuna… ustedes la escucharon, habló de él en pasado y… y yo no me había puesto a pensar en esa posibilidad —Minho se limpió la cara con la manga de su buzo, en vano porque las lágrimas seguían mojando su rostro.

—Pero Minho… habló de él en pasado porque estaba hablando de su infancia, en ningún momento dijo que estaba muerto —Jisung respondió.

—¡Pero es obvio!

—No lo es… eres el único que lo pensó —Hyunjin habló, acercándose más a él y dándole un fuerte abrazo—. Estás asustado y es normal, Minho. Sor Hyuna nos dijo que podría encontrarse contigo en una cafetería a unas cuadras del hotel. Irás y hablarás con ella ¿Está bien?