Capítulo I.

4 0 0
                                    

Soy Charlotte, es mí primer día en la Universidad. Estoy bastante nerviosa pues estaré sola, mís amigos están juntos en otra Universidad y yo aquí sola.
No, no es porque yo estuviera clavada en estar en esta Universidad. Mís padres y yo tuvimos que mudar nos a otra ciudad al norte de Nicaragua, eso me pego muy fuerte pero no podía negarme, por eso ahora tendré que enfrentarme a la Universidad SOLA. Así que ahora estoy parada en la puerta de mi nueva habitación... Compartida. No es que sea hija única, de hecho tengo un hermano, pero pues nunca compartimos habitación. ¿Que puede salir mal de esto? Después de todo... Hay un 50% de posibilidades de que mí compañera no sea mí tipo. Entre...

Vanessa

Me encontraba organizando mí lado de la habitación, lo único que esperaba es que mí nueva compañera fuera alguién a la que no le molestara que entrará más gente a demás de nosotras a la habitación. Mís pensamientos fueron interrumpidos cuando una chica entró a la habitación, supongo que es mi compañera de habitación, tenía ojos cafes, el pelo de azul y era como... ¿Palida? No estaba fea, que problema hiba a hacer ella para mí.
-Hola, soy Vanessa.
-Hola... Un gusto, soy Charlotte.
Eso dijo ella con timidez, se veía muy nerviosa, no quería incomodar la así que no supe que decir.
-Puedes acomodarte, de todas formas voy a salir.
Tras esto la mire y después salí de la habitación, tenía muchas cosas de las que preocuparme entre ellas mí novia Daniela estába bastante enojada conmigo tengo que admitir que me molesta un poco eso pues sólo se enojó conmigo solo porque no le conteste las llamadas y aún así me sigue llamando.

Estaba muy estresada como para contestar así que decidí dejar que sonara el teléfono y simplemente me fui a terminar las cosas que tenía que hacer pues debía ir a averiguar qué clases me tocaban y mis horarios, solo estaba esperando y rogando para...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Estaba muy estresada como para contestar así que decidí dejar que sonara el teléfono y simplemente me fui a terminar las cosas que tenía que hacer pues debía ir a averiguar qué clases me tocaban y mis horarios, solo estaba esperando y rogando para que no lloviera pues no quería llegar con el horario todo mojado a la habitación. Me puse a pensar en que es lo que escogería la chica de pelo azul ¿y si nos tocaban las mismas clases? Genial, así tal vez me haga una amiga. Pero en realidad a quien voy a engañar, esa chica se ve como una matadita que tal vez estudie medicina, en fín. Para cuando mire; ya había logrado salir de ese pasillo que parecía eterno, o tal vez mis pensamientos son muy rápidos y parecen eternos. No se, simplemente una pregunta sin respuesta. Al salir me fui directo a preguntar sobre mis clases y mis horarios, en el camino me encontré con Daniela. Cuando la vi parada a un lado de la oficina me quedé atónita ya me esperaba la pelea de el siglo, di un suspiro y seguí adelante, después de todo tenía que enfrentarla en algún momento ¿por qué no en ese momento? Tal vez se le pasaría un poco el enojo si pasaba un rato con ella, sí estaría jugando con su mente pero al menos me saltaría el "regaño" de Daniela. Cuando pase por donde ella; me jaló como si hubiera sido la peor persona en su vida, tampoco fue para tanto, me había alejado de un montón de gente y ahora tenía que arreglarme las por mi cuenta.
-¿¡Quién te crees, Vanessa!?
-Sabes perfectamente que no fue para tanto, me estaba despidiendo de mi familia y estaba arreglando mí habitación.
-¡Eso no es ninguna excusa para no contestar ni una sola de mis llamadas!
-En realidad, sí. Si lo es.
Ella estaba enfurecida, no me dejó ni siquiera invitarla a estar conmigo por el rato pues se fue, ya a partir de ahí supongo que no es mi problema y fue su decisión ¿verdad? En todo momento me veía muy tranquila y serena, pero en realidad tenía mucho estrés, tanto que ya era molesto, quería simplemente terminar rápido e irme a dormir un rato había sido todo muy agotador, esperaba que en cuanto empezaran las clases no estuviera tan estresada, pero en realidad clases es igual al doble de estrés y eso que no voy a estudiar nada que tenga que ver con matemáticas o por lo menos es lo que yo estuve esperando desde que elegí mi carrera.
Me esperan meses difíciles.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 29 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Un siemple primer año. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora