[19] 𝐇𝐢𝐣𝐨 𝐝ℯ𝐥 𝐬𝐨𝐥

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Cuando lord Lothbrok me ordeno ir a dragónstone para recibir un paquete de Dragónglass, no me esperaba tener en mis manos un huevo de dragón. Todo paso tan rápido.

Primero, no podia creer la hermosura del castillo. Toda la estructura era practicamente majestuosos dragones, cada uno mas hermoso que el otro. No podia entender como Lord Lothbrok preferia King's Landing a esto.

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Después de conocer a lord Stannis, mis hombres cargaron los paquetes de pescado, Whisky y Coca-Cola, para intercambiar por dragónglass, Pero en medio de eso, mi cuerpo se empezó a mover solo, como si tuviera su propia mente, agarró un caja y se empezó a adentrar al castillo. Yo no podía hacer nada, intenté con todas mis fuerzas luchar contra mi cuerpo, pero después de un rato entendí que no podía hacer nada, así que permití que mi cuerpo se moviera por si solo, por razones que aún no sabía.

Mi cuerpo se agachaba, detenía y escondía cuando escuchaba voces, parece que no quería ser descubierto. Mientras más caminaba, más profundo íbamos hacia las entrañas oscuras del antiguo hogar de los dragones. Cuando más profundo íbamos, más oscuro se ponía, solo se podía escuchar el sonido que hacían mis botas al caminar, y cuando llegamos al extremo más oscuro, silencioso y asquerosamente oloroso, mis manos se estiraron para recoger algo.

La misma cosa que lord Lothbrok está sosteniendo en este momento.

Un huevo de dragón.

No lo podía creer, se supone que los dragones están extintos, Pero ahora mismo estoy viendo la prueba de lo contrario.

"Sir Arturo" dijo lord Lothbrok llamando mi atención.

Yo solo asentí en su dirección para que sepa que estoy escuchando.

"Puedes retirarte" fue lo último que dijo antes de que me echara de su recamara.

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Hace un rato llevo sintiendo la vibración del huevo en mis manos, cada vez más rápido y fuerte, si no me equivoco, creo que está apunto de nacer. Así que le dije a Sir Arturo que se retirará, cuando me serciore de que nadie más podía escuchar o ver nada al máximo rango que mis oídos podían escuchar, mi vista se concentro totalmente en el huevo. Podía oír un pequeño latido en el interior, podía sentir el calor agradable que generaba, y el olor a quemado que dejaba a su alrededor esa pequeña criatura adentro del huevo.

Al pasar de los segundos, el latido se hacía más fuerte y rápido, el calor alrededor iba aumentando Pero yo no soltaba el huevo.

Finalmente, el huevo empeze a romperse, una pequeña grieta, luego otra y luego otra.

Cuando el huevo estaba lo suficientemente débil, una pequeña patita empezó a mostrarse. Los trozos iban cayendo al suelo, dejando que más del cuerpo de la pequeña criatura se mostrase. Cuando solo quedo la base del huevo en mi manos, se podía ver a un pequeño dragón, el era negro como la noche, con los ojos rojos como la sangre.

Después de un rato observando su entorno, el pequeño dragón conecto miradas conmigo.

Cuando sus ojos se alinearon con los míos, sentí una conexión, como si estuviéramos destinados a estar juntos.

El dragón empezó a moverse en dirección afuera del huevo, asi que deje el huevo en el piso y deje que el dragón se familiarizará con su alrededor.

El estuvo un rato caminando por toda la habitación, oliendo y tocando todo, hasta que se aburrió y sus pequeños pasos se dirigieron hacia mi.

Con sus pequeñas patitas combinadas con su estatura, no pude evitar pensar en un perro salchicha.

Cuando por fin llegó hacia mi, extendí mi mano hasta su altura y el la empezó a oler. Después de eso, lleve la misma mano hacia su cabeza y empeze a darle caricias, las cuales el acepto con gusto.

Después de un rato dandole mimos a la pequeña criatura, este subió por mi brazo y se posicionó entre mis hombros y mi cuello, allí enredo su cuerpo alrededor de mi cuello. Cuando hizo está acción, en vez de obviamente sentirme afixiado, me sentí bien. El calor que el dragón irradiaba era el más agradable que había sentido.

Cuando termine de relajarme por el calor del dragón, abrí mis ojos grandemente al darme cuenta de algo.

"¡Oh por el dios de mierda!, no te he dado un nombre. ¿Cuál podría ser?" Le dije al dragón mientras acariciaba su cabeza entre mis hombros.

"Humm, veamos..."

"Que tal... Rhaegar"

*Sin reacción*

"¿Caraxes?"

*Sin reacción*

"¿Drógón?"

*Sin reacción*

"¿Y si te llamo 'Lóng'?, significa dragón en chino" le pregunté a mi ahora hijo.

Este soltó un rugido de aprobación.

"Jaja, okey, Lóng sera" dije mientras dejaba al ahora dragón conocido como Lóng en una caja con unas mantas que estaba cerca de la fogata.

Me quite mi ropa, me puse mi pijama y me acosté en mi cama.

Estaba empezando a caer en el sueño, cuando de repente sentí peso extra en mi cuerpo. Abrí lentamente mis ojos, solo para ver a mi bebé dragón parado encima mío, mirándome fijamente. Tenía suerte de que B'jorn decidiera dormir afuera con su hermana, porque de lo contrario, estos dos se hubieran matado.

Cuando terminó de mirarme, Lóng se posicionó entre mi cuello otra vez, en el proceso afixiandome... Otra vez.

Después de un rato en el que me acostumbré al peso en mi cuello, finalmente caí dormido en los brazos de Morfeo. Junto a mi nuevo hijo.

Lóng.

𝔓𝐀𝐍𝐓𝐇𝐄𝐑 / 𝐆𝐀𝐌𝐄 𝐎𝐅 𝐓𝐇𝐑𝐎𝐍𝐄𝐒 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora