Me levanto con cuidado y sin prisas, me acababa de despertar y no quería perder el equilibrio y caer. Camino con cuidado hasta llegar al closet, elijo unos jeans negros y agarro una playera color azul claro; entró al baño y me quito los boxers y me adentro en la ducha.
Paso un buen rato dentro de la ducha disfrutando de la agradable sensación que causa el agua tibia en mi cuerpo, es super reconfortante una ducha temprano en la mañana, hoy tengo varios exámenes pero ninguno de ellos me preocupa tanto como el de matemáticas, odio las matemáticas.
Salgo de la regadera y me seco con una toalla, miro mi reflejo en el espejo y lo primero que veo son mis ojos, hoy estaban muy apagados y carentes del brillo que los caracterizaban, tengo unas bolsas debajo de los ojos debido a la falta de sueño; últimamente no había podido dormir bien debido al insomnio; casi siempre cuando estaba así jugaba algunas partidas con Max.
Max es mi mejor amigo, somos compañeros desde que tenemos uso de razón y desde siempre hemos sido buenos amigos y ahora somos compañeros inseparables e imparables en los juegos. Le tengo demasiado aprecio a Max y sé que el también a mi que ambos seriamos capaces de dar la vida por el otro; hasta ese punto llega nuestra amistad, soy capaz de poner mi vida en sus manos.
Camino rápido hasta la cocina para desayunar un poco antes de ir al colegio, odiaba el colegio, lo detestaba pero hoy más que ningún día tenía que ir, había exámenes y no podía faltar dado que ya estos serían los últimos para terminar el año.
Una vez que termine con estos exámenes ya podría incorporarme a la universidad y poder escoger la carrera que tanto me gustaba: "programador informático".
El autobús no tarda mucho en llegar y subo a él, veo a Max sentado en uno de los asientos del fondo y me apresuró a llegar a su lugar antes de que el chófer emprendiera la marcha.
—Hey Allan ¿que tal estas? —me saluda Max con la alegría que lo caracterizaba habitualmente.
—Cómo una mierda —pronuncio con desgano—. ¿Cómo puedes estar tan contento luego de no haber dormido nada?
—No lo sé, es normal en mi —dice con una sonrisa radiante.
—Te detesto.
—Yo sé que me amas no lo niegues.
—Hecha para allá marica —le digo empujandolo.
—Heriste mis sentimientos —dice poniéndose la mano en el pecho y haciendo drama.
—Estas hecha toda una princesa —se escucha un comentario detrás de nosotros.
Max se levanta rápidamente de donde estaba sentado y mira con una mirada fulminante a uno de los chicos que estaban detrás nuestro.
—¿Que dijiste perra? Ven y dímelo a la cara si tienes tantos huevos —dice enojado Max al chico.
—Hey Max calmate —intento calmarlo.
—Si calmate puta y vete con tu noviecito si no quieres problemas —dice el imbecil que esta detrás nuestro mirando a sus amigos y riéndose probablemente de nosotros.
—¿Problemas? ¿Y quien nos lo dara? ¿Tu? Jajaja no me hagas reír —digo esta vez yo—, no eres hombre ni nada; no eres más que basura.
—Jajaja mira quien lo dice, el chico que en su vida a tocado una teta —sus amigos me abuchean y guardo un silencio casi sepulcral.
—Allan es mucho más hombre que tu escoria —me defiende Max ante mi notable silencio.
—No me hagas reír —dice el chico fingiendo una risa—, vallan a besuquiarse y no estén jodiendo más, hijos de puta.
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Tales of Phantasia
FantasyMiles de veces he intentado cambiar mi vida por la de los personajes de los videojuegos; ellos tienen una vida llena de dificultades, dolor y aventuras increíbles. Quería tener una vida de esas, siempre que podía jugaba los juegos; imaginaba y soñab...