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Mar y noche.

El sol amenazando con salir de aquel horizonte, gaviotas pasando y la brisa del mar junto al ruido de las olas romper contra el barco hacían de ahí un lugar tan deleitable

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El sol amenazando con salir de aquel horizonte, gaviotas pasando y la brisa del mar junto al ruido de las olas romper contra el barco hacían de ahí un lugar tan deleitable.

5:45 AM marcaba el reloj y nuestro rubio cocinero favorito había despertado. Evidentemente a preparar el desayuno. No pasaron ni 10 minutos y el ruido en aquella cocina se hizo presente. La estufa prenderse, los cuchillos cortar contra la tabla de madera, las verduras freír en aceite, el grifo abrirse... Sí, bueno, tampoco hay que ponernos a contemplar todo, dejémoslo en que nuestro querido rubio hacia de aquel lugar, su lugar.

El olor no tardó en inundar la mayor parte de esa cocina, y ni hablar del lugar. Tan pronto el olor llego a las habitaciones hizo acto de presencia un peculiar pelinegro con su típico sombrero de paja, así es, Monkey D. Luffy.

Aquel hombre que si le preguntas la hora te termina diciendo que se convertirá en el rey de los piratas. No hay que negarlo, creemos firmemente en que algún día lo logrará y junto a el, estará este espectacular cocinero de primera.

"¡¿Ya está listo?!". Preguntó un Luffy sonriente con desesperación al lado del rubio.

Sanji, el protagonista de nuestra entrada. Contesto con una sonrisa. "No, pero ya casi".

"¿Tardará mucho?" Preguntó un evidente decepcionado pelinegro.

"Luffy".

"¿Sanji..?"

"¡Aprende a ser paciente!". Reclamó con una espátula en mano, apuntando hacia el pelinegro. "El desayuno estará listo en 8 minutos, por ahora, despierta a los demás y así te olvidas por un momento del hambre". Su vista regreso a la comida ante lo dicho.

Al pelinegro no le quedó más que aceptar con un puchero así que sin reclamar comenzo a caminar hacia la puerta pero antes de salir estiró su cuello de reversa y llamo al rubio.

"Sanji. Gracias por hacer la comida todos los días. Me gustas". Confesó, al mismo tiempo que una sonrisa incluso más iluminante que el mismo sol se hacía presente en su rostro. Sin más, su cabeza regreso a su sitio. "Me gustas" esa palabra para Luffy era la variante de decir "Me agradas, te quiero". Este, al ser tan inocente y no pensar en situaciones amorosas, un me gustas era algo tan normal para el. Según su diccionario mental, significaba decir que aprecias mucho a alguien.

Si bien, no está tan alejado de la realidad si lo pensamos detalladamente.

El rubio dejó de hacer lo que estaba haciendo, quedando quieto en su lugar. Su cigarro casi cae. Sus ojos se cristalizaron por un momento y su pecho se sintió tan cálido. Conocía a su capitán, sabia perfectamente lo que aquella última palabra significaba para el, así que eso no era lo que lo hizo reaccionar de tal manera. "Gracias por hacer la comida..." es evidente que al ser el cocinero del barco su puesto ahí era cocinar pero, que le agradecieran por ello...Más que eso, es la primera vez que le agradecen por algo en su corto tiempo de vida.

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⏰ Última actualización: Apr 12 ⏰

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