Dall'odio all'amore - Rigel Wilde

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01.03.2024

Despertar temprano definitivamente no es algo que acostumbro a hacer el fin de semana, pero hoy es un día importante para mis padres.

Llegó el gran día de la adopción de aquellos chicos del orfanato, Nica y Rigel.

Con Nica he conversado algunas veces, es muy dulce, y con Rigel.. nunca lo he visto. Todo el tiempo estaba en el piano del orfanato tocando melodía tras melodía.

Hoy es el día de conocerlos bien, hablar con ellos.. vivir con ellos.. algo difícil para mí, estoy acostumbrada a ser hija única.

08:30 am

Me quedé en casa arreglando la llegada de los chicos mientras mis padres iban por ellos, el orfanato estaba a 02 hrs de nuestra casa, así que había suficiente tiempo.

Arreglé las habitaciones de Nica y Rigel, las camas tendidas con sábanas blancas, mantas de color gris y rosa, almohadas y un pequeño detalle de parte mía.. una canasta elegante con flores y golosinas.

Los detalles así son algo clásico de mi, así sea por la más mínima acción que hayan hecho por mi. Limpié el piso de toda la casa, ese aroma floral que a todos les encanta hacia que todo se sintiera en armonía.

Al terminar de limpiar toda la casa me recosté en mi cama y cerré los ojos, al abrirlos me di cuenta que me había quedado dormida.

— Joder..

Miré mi celular y vi los mensajes de mi madre.. mierda me quedé dormida dos horas.

Mamá

Hola cariño, Nica y Rigel
ya están con nosotros!

Genial! ¿Ya vienen
en camino?

Estamos a nada de llegar,
espero que estés lista ya.

Pff, estoy lista desde
hace horas

Execelente, ya te vemos!

10:30 am

Cómo les explico que no tarde ni 10 minutos en estar lista, por suerte tengo el cabello ondulado, no necesito hacerme nada en el pelo.

Maquillaje natural, vestimenta casual y cómoda, accesorios y perfume, aliento fresco y limpio, justo a tiempo pues habían llegado.

— Cariño hemos llegado! — Gritó mi madre desde la planta baja de la casa.

Al bajar pude ver a los chicos entrar por la puerta, Nica corrió a abrazarme y correspondí aquel cálido abrazo.

— Al fin estamos juntas Violett

— Es un honor que estén aqui — Miré hacia la puerta donde Rigel estaba metiendo su equipaje, este me miró y se limito a voltear con Nica para decir..

— Ve por tus maletas, o también quieres que yo las meta. — Nica rodó los ojos y salió por su equipaje mientras yo me acercaba a Rigel.

— Hola! Soy Violett — Extendí mi mano para saludarlo educadamente.

— Rigel. — solo miró mi mano y después fue con mis padres para preguntar por las habitaciones.

— No te preocupes, el es así. — dijo Nica mientras lidiaba con sus maletas.

— Permíteme ayudarte — tomé una de sus maletas y sonreí — Te llevaré a tu habitación

Subimos las escaleras y la lleve hasta su habitación, ahí bajamos las maletas y ella comenzó a ver la habitación detalladamente.

— ¿Que te parece?

— Es hermosa! ¿Quien escogió la decoración?

— Yo, presté atención a casa detalle de tus gustos y así fue como salió este diseño — Sonreí amable

— Wow.. eres increíble, me encantó

Antes que pudiera decirme algo más fue interrumpida por Rigel.

— Muéstrame mi habitación. — Me miró a los ojos, no era una mirada tranquila.. era profunda y obscura.

— Claro, sigueme — Caminé delante de el mientras sentía su mirada clavada en mi espalda y me seguía.

— Aquí es, no supe que diseño hacer.. no te conozco mucho.. — Bajé la mirada y el entró.

— No está mal. — Se acercó a mi dejándome ente la puerta. — ¿Tu cabello es naturalmente así?

Su mirada me ponía nerviosa, mientras se acercaba cada vez más..

— Oh, si es ondulado y rubio naturalmente.. porque? — Puso un mechón de mi cabello tras mi oreja.

— Es raro ver a una rubia ondulada y linda.. —  Se separó al escuchar pasos por las escaleras y fingió que no pasó nada.

— Violett, deja que Rigel tenga su espacio solo — Dijo mi madre mientras entraba por la puerta.

— Ah si, lo siento Rigel — Me fui sonrojada pues no dejaba de verme.

No puedo verlo con... esos ojos, será mi hermano..