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-Este lugar es...

Nakyum traga saliva.

No sabe dónde mirar.

Sus inocentes ojos pasean por todos los rincones que hay por y para ver. Y seguramente muchos más escondidos que no le importaría iniciar una aventura para encontrarlos.

-¿Dónde estamos?

-En mi casa.

-¿¿Vives aquí?? – se cubre la boca al haber gritado demasiado alto - ¿Y el apartamento donde estuve la última vez?

-Esa también es mi casa.

Responde Seungho como si tener más de una vivienda fuera lo más normal del mundo pero entonces Nakyum recuerda que ese chico es de otro mundo muy distinto y lejano al suyo.

-¿Y por qué hemos venido aquí?

"Porque ni muerto te llevo al otro sitio donde Jihwa no te dejaría ni a sol ni a sombra"

Se le oscurece la mirada de pensar en cómo su amigo picaría a Nakyum para verle sufrir o ponerle celoso.

-Este sitio es enorme.- murmura asombrado y más que se asombrará en cuanto ponga un pie en el interior de la enorme mansión de Yoon Seungho. Una mansión que a Nakyum le resulta familiar – Quizás estoy alucinando y eres libre de abofetearme si empiezo a fangirlear muy fuerte pero ¿No usaron una casa muy parecida a esta para filmar Pintor Nocturno?

-¿Has desperdiciado tu valioso tiempo en ver esa basura?

-¡No es ninguna basura! – exclama ofendido – Es una historia desgarradora con un final lacrimógeno y hermoso.

-El protagonista es un jodido enfermo bastardo.

-Sí, bueno, no es un green flag de letras mayúsculas pero cambia al enamorarse del pintor.- juguetea con el bajo de su ancha camiseta de manga corta. A él al principio de la serie no le gustaba el señor pero conforme iba avanzando la historia se sentía más y más atraído por él - ¿Vamos a quedarnos aquí hasta el Nacional?

-Este lugar no está habilitado para vivir, nosotros nos quedaremos en la otra casa.

-¿Hay más casas?

A Nakyum le va a dar un sincope.

¡ESE LUGAR ES TAN GRANDE COMO SU BARRIO Y TODO PERTENECE A LA FAMILIA YOON!

-¿De verdad es tu casa o solo estas fardando?

-Mi padre me la regaló por su falta de atención, amor paternal y educación al no estar presente durante casi toda mi adolescencia.- habla tan normal – Terminaron de rodar la serie, mi madre le puso voz a la banda sonora, y mi padre quiso hacerme partícipe de todo su reconocimiento regalándome este enorme lugar para después irse a rodar a otros países.

-No pareces muy feliz de dicho regalo.

-Cada vez que mis padres debían marcharse del país por su trabajo me hacían un regalo. Peluches, juguetes, puzles, relojes, motos, coches, una casa, un ático, un avión privado.- ¿ti-tienes un avión privado? Titubea Nakyum – Y todos los he acabado vendiendo o regalando a mis amigos.

-¿Por qué sigues conservando la casa?

Seungho mira hacia otro lado.

Nakyum sigue su mirada. Se queda sin aire cuando el ámbar en sus enormes ojos se intensifica al fijarse en una arboleda cuyas hojas se mecen con la suave brisa.

Toy BoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora