What If...? The Archer [Daryl Dixon] ²

6. Peace

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"¿Seria suficiente si yo nunca pudiera darte paz?"

Daryl y Raiden habían regresado a Hiltop después de que entendieron que estar en el reino era una perdida de tiempo, querían luchar para enfrentar a los salvadores de forma que sabían que no debían de estar en el reino resguardados.

Daryl se había mantenido con su atención en Raiden y en como el castaño se mantenía alejado del resto.

Sasha y Rosita habían comenzando unas practicas para entrenar a los de Hiltop con cuchillos donde al final Raiden se unió para explicarles el como lanzarlos, nadie mejor que el en esa área.

Era como si Raiden no estuviera ahi, callado, ermitaño, molesto. No era él.

Daryl le daba todo el tiempo que necesitara pero comenzaba a creer que no parecía ser suficiente.

Alzó su vista cuando sintió la mirada de Raiden puesta en él, el castaño llevaba el ceño fruncido cono si estuviera pensando demasiadas cosas al respecto, Daryl lo sintió como si estuviera pensando cosas sobre el, luego desvió la mirada y avanzo hacia Rosita a susurrarle algo.

Entonces Daryl continuo con su tarea de cortar su manzana con la daga que Raiden le había dado, recién le había sacado filo.

Raiden avanzo hacia Maggie, la castaña le miro con una pequeña sonrisa extendiéndole un pimiento que había cultivado.

— Eres buena en esto — comentó Raiden.

— Crecí en una granja — se encogió de hombros Maggie — ¿Como estas?

— Respirando.

— Glenn siempre decía que tú eras la esperanza del grupo, el que mantenía el animo — comentó Maggie — Y ahora no tienes nada de eso.

— Las personas cambian.

— Tú no cambiaste — señaló Maggie — A ti te obligaron a hacerlo.

— A todos.

— No, contigo es distinto — dijo Maggie — A ti te han corrompido. Ya no eres ese chico encantador.

— Se que es decepcionante — murmuró Raiden — Y creo que tal vez nunca volveré a ser el mismo. Ahora tan solo me siento... vacío.

— Entiendo el sentimiento — admitió Maggie — Tal vez mas que nadie.

— Lo siento, Maggie — dijo Raiden con honestidad — Realmente lo siento.

— Esta bien — respondió la castaña viéndolo con sus ojos cristalizados, Raiden tenia aspecto de querer soltarse a llorar en cualquier momento — Este bebé es lo único que me queda de Glenn, la razón por la cual quiero seguir luchando..

— Maggie — llamó Raiden — Ya no me gustan las promesas, pero yo te prometo que lo cuidare. A ti y al bebé. Ambos queremos lo mismo y lo obtendremos.

La muerte de Negan y los salvadores.

La castaña asintió con la cabeza, en eso unas campanas se escucharon alertando que los salvadores se acercaban.