° Capítulo 1 ° Recuerdos °

41 2 9
                                    

Esa misma noche no pude dormir, solo pensaba en esa carta y el papel, mi cabeza está en un círculo continúo que no para; realmente no sabía qué hacer y/o como reaccionar. Solo pensaba en ese chico, bajé de la cama para abrir la caja, pero cuando me agaché no estaba, en ese mismo instante pensé que alguien la había agarrado, preocupada bajé las escaleras corriendo para ver si estaba en la primera planta. Cuando llegué a la mitad de la escalera sentí un césped muy suave en mis pies, estaba tocando flores con las manos, cuando levanté la vista estaba ahí, llorando, en un rincón, la misma persona del bosque; mi casa de repente era como la de un hada; la escalera estaba repleta de flores y pasto verde, había mariposas y abejitas, era como un paraíso.

Pero él estaba triste, se notaba en su llanto y sus tartamudeos, se levantó del suelo cuando estuve frente a él

¿Por qué Emma? Necesito que leas todo, por favor - me rogaba mientras seguía llorando

Todavía no sé quien sos, ¿Me podes dar alguna explicación? - Le respondí angustiada -

Él tenía una mirada perdida, con dolor y tristeza, cuando miré sus manos, el tenía mi caja, me la dió y, su rostro cambió completamente a una cara de vergüenza y angustia

Esta es tu caja, necesito que leas lo que hay ahí adentro, es muy importante para mí ahora y yo sé que no ahora no entendes nada, pero confiá en mí, por favor Emma - Me dijo mientras extendía sus brazos hacia mí con la caja -

En el desespero de no saber qué hacer, de no saber si esa persona es real, o si me estoy volviendo loca, o si estoy soñando él interrumpe

Escaleras, tu habitación, una flor rosa, me vas a recordar... -

Miré hacía atrás y las escaleras habian vuelto a la normalidad, comencé a subir a un paso lento, pero no quise irme sin decirle algo antes, mi cara giró hacia donde él estaba pero había desaparecido; me quedé confundida mirando a la hacia la nada misma y después de unos segundos seguí subiendo lentamente las escaleras. Entré a mi habitación sin hacer ruido, apoyé la caja en la cama para abrirla, cuando la destapé había un ramo de flores con la carta y papel que yo había dejado, levanté suavemente las flores, eran mis favoritas, gardenias blancas. Desparramaron un aroma tan tropical, me pusieron de buen humor; me quedó en la cabeza rondando lo que me dijo cuando subí las escaleras, "Escaleras, tu habitación, una flor rosa, me vas a recordar."

Me lo dijo como si fueran indicaciones, ahí me di cuenta que eso eran, indicaciones de adonde ir, solo me quedaba ver la flor rosa, en mi ventana siempre puse flores y plantas, me suelen calmar y me gusta el aroma que deja en mi cuarto. Abrí la ventana, empecé a observarlas con mucha atención, me percaté que una maceta tenía una nota dentro. La agarré y corrí a mi escritorio con la carta y el papel abrí los tres y los leí otra vez, el papel no lo había leído nunca, no sabía que decía; cuando lo abrí estaba escrito un poema

Reencuentro en el tiempo

En el jardín de los recuerdos, donde el

tiempo se detiene,

donde las sombras del pasado, en

silencio, se mantienen.

Allí en el reencuentro de dos almas

pérdidas,

se despiertan las emociones, por el

tiempo adormecidas.

Amor, dulce veneno, que en el pecho se

anida,

como una llamada ardiente, que nunca se

olvida.

Eres la melodía que en mis sueños

resuena,

Cada Cuatro AñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora