83 - Felices

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Se habían pasado tres meses y algunas cosas habían cambiado alrededor de Loli. La primera gran notícia és que su papá Domingo, después de total reclusión, fue liberado para pasar 3 días de la semana en casa. Él continuaría el resto de tratamiento pero no necesitaría estar en la clínica todo el tiempo, solo en días previamente establecidos. Todo eso acabó haciendo que Loli y él se unieran aún más. Por fin tenía un padre sano. Durante estos meses, los preparativos de la boda también estaban en pleno apogeo. Cómo sería bastante sencillo, no tuvieron problemas. La comida la pondría Mariana, la música Sam y su padre, Lupillo. La ropa la haría Natália. Y la decoración correría a cargo de una empresa muy renombrada de Los Ángeles Todo estaba preparado. En el trabajo, Loli estaba aún más centrada y comprometida con sus obligaciones. La emisora de radio iba incluso mejor que antes y no cabía duda de que el nuevo podcast que se emitía tenía influencia, ya que se había convertido en uno de los favoritos del público. La filial mexicana no se quedó atrás, ya que desde su compra hace meses ocupa los primeros puestos en el país.

Era viernes por la tarde y Loli estaba haciendo otro episodio de su podcast. El tema de ese día era sobre las madres primerizas y el trabajo. Algo que ella conocía muy bien.

Loli: Por hoy es solamente eso. El lunes vuelvo con otro episodio de "Charla de mujeres" - dijo y luego cortó la transmisión.

De pie en el umbral de la puerta, don Rogelio sonrió orgulloso a su hija. Sabía que elegir a ella para dirigir el podcast había sido la elección perfecta.

Don Rogélio: Hija! - dijo abrazándola - Tú programa está creciendo mucho. Estoy orgulloso.

Loli: Gracias, papá. Ay, estoy demasiado feliz!

Don Rogélio: Te mereces.

Loli sonrió. Aprovechando el momento, Loli le hizo una importante invitación.

LolI: Aprovechando que estamos juntos y me gustaría hacerte una invitación.

Don Rogélio la miró atentamente.

Loli: Como ya sabes, mi matrimonio es domingo. Me haría muy feliz que me llevaras a Rafael.. Aceptas, papá?

Don Rogélio ensanchó los ojos sorprendido.

Don Rogélio: Pero Loli...y Domingo? No quiero quitar su lugar. - dijo con la voz rota.

Loli: Él también me llevará. 'Pero yo quiero que a mis dos padres llevándome.¿ Aceptas?

Don Rogélio: Por supuesto que acepto, hija. - dijo emocionado - será un gran placer, no imaginas lo cuanto me hará feliz.

Ambos se abrazaron emocionados.

Loli: Ahora me tengo que ir. Nos vemos el domingo, papá.

Don Rogélio asintió y ellos se despidieron. Loli entró rápidamente en su salón, recogió sus cosas y se dirigió al piso de Natália. Nada más llegar, se saludaron y Loli comenzó las últimas pruebas de su vestido de novia.

Natália: Hice todos los ajustes que me pediste. ¿Qué te parece?

Loli: Me pareció perfecto, Nat. Ahora está mucho más cómodo - dijo mirándose en el espejo.

Natália sonrió.

Natália: ¿No necesita más ajustes?

Loli: No. Se ve maravilloso así. Ay, gracias, Nat. Eres increíble!

Natália: De nada, cuñada. Lo hice con mucho amor.

Se abrazaron cariñosamente. Luego Loli se cambió y tomó un café rápido con Natália mientras hablaban de la boda.

No Estaba En Los PlanesOnde histórias criam vida. Descubra agora