❝Save a Scientist and Ride a... ❞ || Cowboy x Scientist! Reader❜

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La tierra se extiende sin límites bajo el cielo azul infinito. Las llanuras se extienden como un tapiz dorado, ondeando suavemente con la brisa que trae consigo el aroma a tierra seca y hierbas silvestres. El sol del desierto, inclemente pero majestuoso, derrama su luz dorada sobre las colinas ondulantes y los cañones escarpados, pintando el paisaje con tonos cálidos y vibrantes.

Cactus solitarios se alzan orgullosos entre la tierra agrietada, mientras que las formaciones rocosas erosionadas por el viento y el tiempo cuentan historias de épocas pasadas. Los ríos serpenteantes cortan el paisaje, sus aguas escasas pero vitales para la vida en este duro entorno. Arbustos dispersos ofrecen refugio a la fauna del desierto, desde el águila majestuosa hasta el ágil coyote.

En el horizonte, las montañas se perfilan como guardianes imponentes, sus picos nevados contrastando con el calor del desierto. El silencio del desierto es interrumpido ocasionalmente por el ulular de un búho o el aullido lejano de los lobos, recordando a los viajeros la vastedad y la soledad de este paisaje inmenso y desafiante.

El desierto es un lugar de contrastes, donde la belleza cruda y la dureza de la naturaleza se entrelazan en un escenario que ha inspirado leyendas y ha sido testigo de batallas intrépidas entre forajidos y alguaciles. 

Entre el ilimitado paisaje, se alza a lo lejos una zona poblada, con varias casas de madera y caminos de tierra donde caminan carruajes arrastrados por caballos o burros de carga. Personas caminan de un lado a otro ocupados, sin tener tiempo ni de limpiar sus húmedas frentes por el sudor de la tarde donde el sol se alza impasible. 

En la esquina de un bar, abandonada de toda razón y conocimiento, babea una joven con ojos entreabiertos de pescado, sosteniendo con sus dos manos una escoba de paja que se detuvo desde hace minutos, mirando sin mirar la pared de la esquina.

Alguien cerca de ella grita de nuevo, buscando llamar su atención, pero la joven gotea una baba de su boca. Entonces, su jefe se acerca, chasqueando sus dedos de forma molesta.

━...¡---nny! ¡Jenny! ¡Jenny!

De repente, la joven abre los ojos, tragando su baba y casi cayendo al suelo por la sorpresa. Su jefe le grita que se apresure, y ella voltea a su alrededor confusa por el cambio de entorno. 

"¿Dónde...?"

━Despierta, niña, despierta━siente como alguien le chasquea en la oreja, haciéndola alejarse sorprendida━. Dios, ¡mueve ese culo de ahí y comienza a atender clientes! 

━¿Qué...?━ balbucea, apenas recobrando la consciencia. Suelta la escoba en su mano, haciéndola sobresaltarse. Todos los sonidos llegan de repente, sobrestimándola. Tapa sus oídos por inercia y se hinca en el suelo. 

Mientras su jefe le grita, los últimos minutos de su vida regresan a ella. 

Estaba en el laboratorio, cuando una alarma sonó, aturdiéndola. Sus compañeros corrían, ella no lo hizo... ¿o sí?

No puede recordarlo todo. Pero recuerda una cosa...

Ella no estaba aquí antes.

━¿Qué te pasa? ¿Quieres dejar a los clientes sedientos?━ ella levanta la mirada, mirando a un hombre de rasgos toscos, nariz grande y roja, con una panza de borracho━ Niña tonta... por eso tu madre siente tanta vergüenza de ti. No sirves ni para barrer o atender a los hombres. Siento pena por quien vaya a ser tu esposo. 

━¿Qué?━ repitió de nuevo. Se dio cuenta de que algo había en su boca, por lo que se limpió la baba rápido, y entonces, miró su mano. Había una manga blanca con olanes. Entonces, vio toda su ropa. Llevaba una falda larga hasta las pantorrillas con la parte superior completa que la cubría por completo. No dejando ver nada de piel, hasta su cuello se sentía apretado.