CUENTOS DE UNA LUJURIA DESENFRENADA.

CAPITULO 8. LLEVARSE LA PRESA. BALEAL DEMUESTRA SU PODER.

A partir de ese día, de ese momento todo se fue por el caño pero no fue como si hubiera sido de inmediato, fue como una escalera de desastres que acabo en una tragedia falsa, tan falsa como lo que dicen sobre mi madre pero ¿Qué ese real y mentira a estas alturas? Uno no lo puede ver si antes esperar que la tragedia llegue.

Retomando la historia, llegué a la escuela a toda prisa totalmente fuera de mi, no pensé en nada, no tenía un plan en concreto solo quería matar a Baleal, quería romperle todos sus huesos y hacerlo pagar. Al llegar a la escuela  no hice lo busque con la mirada pero no lo encontré, la campana estaba por tocar pero no importa, comencé a recorrer los pasillos de la escuela buscando a Baleal en todo salón que veía, en uno de ellos alcance a ver Jonny pero como buscaba a Baleal no hice caso cuando el me pidió esperar para hablar. Seguí buscando pero no encontré nada, ese cobarde no tiene las agallas para verme la cara, pero si tiene los huevos para violar a mi madre. Pronto las clases empiezan pero a mí no me importa, por mi ira no me doy cuenta que entro al salón de los profesores, pero me encuentro con quien menos lo esperaba, con Baleal.

—¡Baleal!—Le grito claramente enojado y me le abalanzo sobre el pero un maestro me toma del hombro y me aleja con suavidad pero con autoridad—¡Suéltame!—Dije claramente enojado pero el profesor se mantuvo serio.

—Hola Jacobo —Me saluda Baleal con una clara sonrisa de oreja a oreja—Me da gusto encontrarte en un día como este—Esta bebiendo un te en la que parece ser un escritorio de oficina—Me da gusto verte después de un día tan hermoso.

—¡Cállate!—Le grite intentando zafarme del agarre pero el profesor era fuerte—¿Cómo te atreves? ¿Cómo te atreves? Hice todo por ti, creí que realmente eras mi amigo pero tu,…

—Por favor amigo—Dice el con total naturalidad mientras mueve su silla con diversión—No peleamos cuando estamos en un momento tan feliz, además ahora soy como tú padrastro, ¿No es algo tan genial?—Dice el mientras se levanta y me mira con alegría pero también con malicia—Tienes un padrastro de tu edad.

—Déjate de estupideces Baleal, no entiendo porque, pero, pero no te perdonare por esto.

—Tranquilo Jacobo, para empezar no quiero que me perdones, ni siquiera necesito tu perdón, esto es algo que estaba por pasar. Tu madre ya era mía desde el principio.

—¿De que hablas?—Pregunte ahora confundido, Baleal solo sonríe y hace un ademan con su mano, el profesor me suelta y yo me le quiero acercar pero este me hace una señal de que pare.

—Se que estás molesto pero debes tranquilizarte Jacobo, si continuas así solo me harás las cosas más fáciles, quieres saber sobre tu madre, lo entiendo pero no sé porque lo quieres saber, después de todo ella ahora es mía.

—Tu la violaste—Le recalco duramente a lo que veo solo suelta una risita burlona.

—Si, claramente lo hice pero, fue hermoso, después de todo eso fue mi primera vez y estaba muy excitado, yo la amo Baleal.

—¿Y solo por eso destruiste a mi madre? La violaste en su casa, yo confíe en ti maldito.

—Claro que confiaste en mi pero lo hiciste porque lo quisiste, además de que en cualquier momento iba a ser mía. Tu madre me pertenece y desde antes la había elegido para hacerla mi muñeca, ¿Cómo crees que obtuvieron nueva casa tan rápido y sin tener una sola complicación—Esa revelación me sorprendió mucho. Pero rápidamente uno los puntos.

—La feria, la hipnosis, todo lo planeaste.

—Claro que si, si la hubiera follado sin más me hubieran metido a la cárcel. Necesitaba una solución para ese problema y que mejor que un mago perfecto en la hipnosis, ahora ella obedece mis órdenes y yo puedo hacerla mía en todo momento.