En el barrio de Los Álamos, las casas eran idénticas, con jardines perfectamente recortados y cercas blancas que brillaban al sol. En una de esas casas vivía Camila, una chica de 17 años con sueños grandes y padres aún más grandes... en su disciplina. Desde niña, le habían enseñado que el estudio era su principal prioridad, que la universidad era el único camino para un futuro prometedor y que las distracciones, especialmente las relacionadas con el amor, solo le traerían problemas.
Su vida consistía en una rutina estricta: levantarse temprano, asistir a la secundaria, participar en todas las actividades escolares que pudieran engrosar su currículum, y luego volver a casa para estudiar hasta tarde. Camila nunca cuestionaba esta rutina, pero en su corazón crecía el deseo de vivir algo más que solo libros y tareas.
Los fines de semana, mientras sus amigos salían a divertirse, Camila se quedaba en casa, bajo la atenta mirada de sus padres, que se aseguraban de que ella siguiera enfocada en sus estudios. Pero todo cambió cuando, una tarde, mientras regresaba a casa después de la escuela, su autobús se desvió por un callejón diferente, debido a un accidente en la calle principal. Allí, vio a un grupo de chicos practicando skate en un parque. Uno de ellos, con el cabello alborotado y una sonrisa tan ancha como el cielo, la hizo detenerse un instante y mirar con curiosidad.
A partir de ese día, algo en Camila despertó. Comenzó a tomar el camino más largo a casa para pasar por el parque, con la esperanza de ver a aquel chico otra vez. Aunque sus padres no aprobarían este desvío, ella no podía evitar sentirse atraída por el sentimiento de libertad que emanaba de aquel lugar y, especialmente, de aquel chico. Sin saberlo, se estaba preparando para el primer acto de rebeldía de su vida: seguir su corazón.
Mientras las tardes se volvían más cálidas y los días más largos, Camila empezó a darse cuenta de que su vida estaba a punto de cambiar. El chico del parque, con su actitud desenfadada y su risa contagiosa, era todo lo que sus padres no querían para ella. Pero para Camila, representaba algo más: la posibilidad de vivir su propia historia, de enamorarse perdidamente, y de descubrir que a veces, romper las reglas puede ser la clave para encontrar la verdadera felicidad.
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Perdidamente Enamorada❤️
RomanceUna historia donde la pasión y el amor se entrelazan, llevando a sus protagonistas a explorar los límites de la devoción y el deseo, mientras luchan contra los desafíos que amenazan con separarlos.