Después de la agitación emocionante y complicada que implicó manejar la situación del dragón, y vaya que tuvieron suerte de no ser atrapados, la vida en Hogwarts comenzó a volver a la normalidad. Helaena, Hermione, Neville, y los gemelos Weasley retomaron sus rutinas habituales de estudio y vida escolar. Sin embargo, la tranquilidad duró poco, pues Malfoy y su idiotas empezaron a buscar problemas.
Helaena salió de la clase de Historia de la Magia sintiéndose drenada. Aunque las historias del profesor Binns podían ser fascinantes para aquellos con un interés ardiente en los detalles minuciosos sobre las guerras de los duendes, para ella, a menudo, resultaban tediosas. Deseando un cambio de ambiente, decidió que unas horas en la biblioteca serían el refugio perfecto.
Mientras caminaba por los corredores de Hogwarts, un ruido sutil captó su atención. Era el eco de pasos que no pertenecían a su propio ritmo. Con una discreta mirada hacia la izquierda, bajo la pretensión de admirar los retratos de antiguos magos y brujas, Helaena echó un vistazo a sus seguidores. Su corazón se hundió al identificar a tres figuras de Slytherin conocidas por su malevolencia: Draco Malfoy flanqueado por sus inseparables compinches, Crabbe y Goyle. "¿Por qué demonios me siguen?", pensó, aumentando el paso.
El trío pareció notar su aceleración y ajustaron su velocidad para igualar la de ella. Con una maldición contenida, Helaena giró bruscamente en una esquina y luego corrió, tomando rápidamente otra antes de que ellos alcanzaran la primera. Detrás de ella, escuchó la voz de Draco.
"¿Dónde está Potter?" dijo, su voz impregnada de frustración.
"No lo sé. ¿Deberíamos mirar?" preguntó Crabbe, su tono lento.
"...La atraparemos en otro momento. No vale la pena perder tanto tiempo," concluyó Draco, y sus pasos comenzaron a alejarse.
Helaena dejó escapar el aliento que no se había dado cuenta que estaba reteniendo y se detuvo para apoyarse contra la fría pared de piedra. Eso había estado demasiado cerca. Se preguntó cuál sería el punto de esa persecución, ya que no tenía nada que ver con Draco y su banda.
Los Slytherin habían sido una molestia constante desde el principio, y ella siempre se había considerado afortunada por el Sombrero Seleccionador la hubiese puesto en Ravenclaw y no en Slytherin. Si eran tan descarados como para seguirla a plena luz del día, no podía imaginar cuán malo podría haber sido si hubiese sido clasificada con ellos. Imaginó ataques constantes en los dormitorios, la sala común, incluso en la mesa de Slytherin durante las comidas.
Sin embargo, la amenaza, aunque mitigada en Ravenclaw, no había desaparecido. Draco y sus secuaces claramente intentaban intimidarla. Recordó cómo Luna Lovegood, su futura compañera de Ravenclaw, también había sufrido intimidaciones ¿no? También tendría que planificar esa eventualidad.
Decidida, Helaena se enderezó y reanudó su camino hacia la biblioteca, esta vez tomando rutas menos transitadas para evitar más encuentros no deseados. Mientras caminaba, empezó a formular un plan. "Si ellos quieren jugar sucio, que así sea." se prometió.
...
No solo era la molestia de Malfoy ya que pronto llegó el tiempo de los exámenes finales, una época que siempre traía consigo un aire de tensión y ansiedad entre los estudiantes.
A medida que se acercaban los exámenes, la atmósfera en el castillo se volvió palpablemente más seria. Los pasillos y las salas comunes estaban llenos de estudiantes que repasaban notas, discutían conceptos y practicaban hechizos. La biblioteca de Hogwarts, en particular, se convirtió en un hervidero de actividad, con casi todos los asientos ocupados desde la mañana hasta altas horas de la noche.
Helaena, nunca tuvo la intención de tomar los exámenes con nada menos que la capacidad de aprobarlos con una puntuación perfecta o mejor. Aprovechando su acceso a la capa de invisibilidad, a menudo se quedaba en la biblioteca mucho después de que cerrara, estudiando en secreto en la tranquilidad que ofrecía la noche y a su experiencia universitaria anterior junto con sus estrategias de estudio esto seria pan comido.
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Entre Mundos: La Travesía de Helaena Potter en el Mundo Mágico
FantasiaEn su vida pasada, Milagros había dado por sentado muchas cosas: una familia amorosa, acceso a terapia y la ausencia de psicópatas obsesionados con estúpidas profecías. Sin embargo, en este nuevo universo, todo parece ser diferente. Las tramas compl...