Alisson se refugió en la librería, donde las estanterías llenas de libros la hacían sentir segura. Su mente vagaba hacia su sueño de ser doctora, pero la actitud de su padre la hacía dudar. La librería era su escapismo, un lugar donde podía olvidar sus problemas familiares.
Mientras caminaba por los pasillos, sus pasos resonaban en las baldosas pulidas. La luz suave de las lámparas iluminaba los títulos de los libros, y Alisson sentía una sensación de calma. Notó a un chico moreno, con ojos verdes, que parecía perdido en sus pensamientos. Alisson sonrió, sintiendo una conexión.
Sin embargo, su distracción la llevó a chocar contra él. Los libros que llevaba en sus manos cayeron al suelo.
"Perdón por mi torpeza. ¿Estás bien?" preguntó el chico, con una sonrisa cínica.
Alisson se recuperó, sintiendo una mezcla de emociones. "Gracias, estoy bien. Me distraje".
El chico se presentó como Matías, y Alisson notó su mirada intensa. "Soy Alisson", respondió, sintiendo un ligero rubor.
Matías se agachó para recoger los libros. "Vaya, eres una lectora empedernida", dijo con una sonrisa.
Alisson se sintió confundida por su sarcasmo. "Sí, me encanta leer", respondió simplemente.
Mientras se despedían, Alisson sintió una oleada de emociones. La actitud arrogante de Matías la había sorprendido, pero también le había recordado su propio sueño. ¿Qué habría dicho Matías si supiera que ella quería ser doctora?
Después de la conversación con Matías, Alisson se sentó en su rincón favorito de la librería, rodeada de libros de medicina. Su mente vagaba hacia su sueño de ser doctora, pero la actitud de su padre la hacía dudar.
Recordó la discusión con su padre la semana anterior. "Las mujeres no deben trabajar en hospitales", dijo él. Alisson se sintió herida, pero no se rindió.
Mientras leía, notó a Matías sentado en una mesa cercana. Su mirada intensa la hizo sentir incómoda. ¿Por qué la observaba?
Alisson se levantó y se acercó a la sección de poesía. Matías la siguió. "Te gusta la poesía", dijo, sonriendo.
"Sí", respondió Alisson, sintiendo una conexión. "Me encanta la forma en que las palabras pueden sanar".
Matías se acercó más. "Creo que podemos aprender mucho de la poesía", dijo, su voz suave.
Alisson se sintió sorprendida por su vulnerabilidad. ¿Qué había detrás de su actitud arrogante?
"Me gusta cómo los poemas pueden capturar emociones", dijo Alisson.
"Exacto", respondió Matías. "La poesía es un refugio".
Su conversación fluyó naturalmente, y Alisson se sintió cómoda cerca de Matías. Pero, ¿por qué su padre no la apoyaba? ¿Y qué secreto escondía Matías?
Al salir de la librería, sintió un ligero roce en su hombro. Al girarse, vio a Matías sonriendo. "¿Qué tal un café?" preguntó.
Alisson se quedó sin palabras, pero su corazón latía con emoción.
_Fin del Capítulo 1_
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Entre sueños y desafíos
Dla nastolatkówEn "Entre sueños y desafíos", sigue a Alisson, una joven inteligente y creativa, mientras lucha por hacer realidad su sueño de estudiar medicina. Sin embargo, se enfrenta a las limitaciones impuestas por su padre y el mundo que la rodea. En medio de...