Kisspril

Primer beso

Los últimos rayos del sol se ocultaban tras las espesas nubes dándoles un color rosáceo y anaranjado que señalaban el final del día. 

A pesar del cansancio en su cuerpo y del constante hormigueo que siente en sus manos tras las extenuantes horas de entrenamiento Wakabayashi sigue teniendo suficiente energía para hablar animadamente con su compañero Schneider.

-En serio Schneider, en Japón hay un jugador excepcional -Wakabayashi apenas y tomaba un momento para respirar, pues, cada que hablaba de su amigo Tsubasa se emocionaba. 

Por su parte Schneider se debatía entre abandonar el campo de juego o lanzarle el balón a Wakabayashi, en su mente cualquier opción sonaba bien para detener ese discurso de fanático obsesionado que le estaba dando Wakabayashi, porque siendo sinceros, porque rayos le interesaría a Karl sentarse a escuchar hablar a Genzo de su adorado Tsubasa, ya estaba cansado de estas conversaciones, que solo lo irritaban, porque vamos, nunca puedes tener suficiente control de tus emociones como para no sentir enojo al tener enfrente de ti a la persona que te gusta y que este solo te hable para contarle lo maravilloso, divertido, inteligente, especial que era su mejor amigo, Schneider sabía lo que era tener un mejor amigo, sin embargo jamás se pondría hablar por horas de él. 

Con toda esta situación Schneider podía confirmar que definitivamente estaba cansado del enamoramiento de Genzo por Tsubasa, pero, estaba más agotado de que Wakabayashi no se diera cuenta de lo que Schneider sentía por él, ya le había dejado varias señales, como entrenar hasta tarde solo para que mejorara, apoyarlo cada que se ponía triste porque extrañaba su país, ayudarlo a practicar su alemán, asegurarse de que descansara y  de que el equipo lo integre, nunca pensaría hacer eso por alguien que no le provocara sentimientos de cariño, protección y amor. 

- ¿Y bien que piensas? 

- Que deberías dejar tu enamoramiento por el tal Tsubasa 

- ¿Que dijiste? -Esas palabras más la mirada de sorpresa de Wakabayashi trajeron la mente de Schneider a la conversación.

Después de un segundo comprendió su error, estaba tan ensimismado en sí, que bajo la guardia y se permitió contestar con sinceridad a una pregunta que no estaba destinada a recibir esa respuesta, ahora tenía que afrontar las consecuencias de ese acto o mejor aún su yo del futuro podría lidiar con eso. 

- Nada -respondió Karl inmediatamente en un pobre intento de emendar su error. 

Antes de que pudiera pensar Wakabayashi en detenerlo, dio la media vuelta para tomar sus cosas y dirigirse a la salida, talvez no era la mejor solución posible, pero fue lo único que se le ocurrió a su cerebro de preadolescente.

Mientras todo eso trascurría Wakabayashi solo se mantenía firme en su lugar intentando comprender como todo este tiempo el amor que creía unilateral era en realidad correspondido. 

Wakabayashi nunca se había atrevido a pensar que Schneider podría llegar a sentir afecto por él, pero, ahora tras esa muestra inconfundible de celos se permitió pensar en convertirse en algo más que el amigo de Schneider, aunque nada de sus fantasías podría hacerse realidad si continuaba ahí parado, necesitaba detener a Karl y cerciorarse de que ambos sentían lo mismo. 

Con cada paso que daba Wakabayashi acortaba distancia entre ambos y sentía que iba a explotar de felicidad, su sonrisa creció hasta dolerle las mejillas cuando al fin alcanzo a Schneider y sostuvo su mano para evitar que siguiera avanzando. 

- No me gusta Tsubasa 

-Por favor Wakabayashi es evidente que sientes un enamoramiento por él.

Genzo respiro fuerte para controlar su ceño fruncido, sabía que si intentaba llevarle la contraria a Karl haría de este momento una discusión donde ambos buscarían tener la razón, no podía permitir que el alemán arruinara el bello instante por su terquedad, por eso, se inclinó hacia su rostro y lentamente junto su boca con la del contrario, sentir el calor ajeno lo incito a mover sus labios, pero, la respiración detenida y los ojos abiertos de Karl lo detuvieron, esa reacción le inundo la mente con pensamientos negativos que se detuvieron cuando vio cerrar los ojos a Karl y sintió como sus manos sostenían sus mejillas comenzado a mover sus labios de manera lenta y torpe, Genzo imito su acción como pudo aunque no duro mucho, el no poder dejar de sonreír impidió que continuara con el beso. 

- Quien me gusta eres tú Karl. 

- Creo que me quedo claro ese punto - Contesto Karl con los brazos cruzados.

Wakabayashi casi le suelta un golpe, no había duda de que Schneider era muy bueno en algunas cosas y definitivamente torpe en otras. 

- No podías respetar la atmosfera romántica y decir algo lindo. 

- No podías confesar tu amor con un discurso tan elocuente como cuando hablas de Tsubasa -Recrimino de vuelta Schneider.

- Karl acabo de dar mi primer beso contigo, ¿No es eso suficientemente especial? 

No debí decir eso, pensó Wakabayashi al ver la sonrisa de autosuficiencia que apareció en el rostro de Schneider. 

- No te atrevas alardear nada -advirtió en tono serio Wakabayashi 

-Mein Bärchen (mi osito), nunca me atrevería a presumir que soy tu primer beso y tú eres el mío. 

Wakabayashi intento no sonrojarse por el apodo que le acaba de dar Schneider, pero noto que fallo al escuchar la risa del chico enfrente de él. 

-Suficiente es hora de irnos, ya es muy tarde.

-Lo que diga mein Bärchen (mi osito).

Schneider sostuvo la mano de Wakabayashi para caminar hacia sus hogares, mientras avanzaba no pudo evitar pensar que no fue tan malo soportar esas interminables conversaciones acerca de Tsubasa, pues, ahora sabía que él jamás podría ser una competencia por el amor de Genzo, a partir de ahora Karl se encargaría de ser el único que podía entrar en el corazón del guardameta. 

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Esto fue lo que escribí por el primer día del kisspril, quedé muy conforme con el resultado a pesar de que inicialmente mi idea era algo vaga.

Ojalá les guste y sigan pasando a leer los próximos au, l@s veré mañana en el segundo día del Kisspril.