Una Última Vez

14 | Te Quiero.

14 | Te Quiero

Janeth

—No quiero darte molestias —me dice Denisse en cuanto entramos a casa.

Pongo los ojos en blanco por milésima vez.

—No es molestias —le digo intentando tranquilizarla.

Ha estado todo el camino diciendo que no quiere molestar y he estado todo el camino diciéndole que no es molestia. Gabriel ha estado todo el camino feliz, cosa que me está poniendo nerviosa.

Si bien no es mi primera vez, no he estado con nadie desde hace mucho tiempo. Años para ser exactos.

Mi última relación fue antes de que me diagnosticaron cáncer. Es decir hace cinco años, antes de que mi papá muriera tenía diecinueve. Estuve dos años haciendo el tratamiento, papá no estaba muy bien de salud. Antes de morir me hizo prometer que haría el tratamiento y que lucharía por vivir y ser feliz.

En ocasiones estuve apunto de dejarlo todo y rendirme pero me contuve por la promesa que había hecho.

Para mí la vida nunca fue lo más importante que tenía. Sino las personas con las que las vivía, creo que hacía mucho tiempo no la disfrutaba cómo lo estoy haciendo ahora. Tengo todo lo que cualquier chica podría pedir; un departamento bastante amplio, amigos que valoro muchísimo, un novio el cual es envidiable. Una buena relación con Mike. (Dejando a mamá y a Roger, fuera, todo está llendo bien)

«Tengo miedo»

Cuando llegamos a casa, Emily estaba preparando la cena, mientras hablaba con Josh por teléfono. A penas nos vio colgó y vino hacia nosotros.

—Te presento a Denisse —ella nos mira con una sonrisa—. Discutió con su madre y no tiene dónde ir.

Denisse intenta hablar pero la interrumpo.

—En realidad puede ir a su casa —ella asiente—, pero me atrevo a decir que tiene el mismo nivel de orgullo que yo.

—No te preocupes por mí no hay problema —responde con entusiasmo Emily—. ¿Y en qué habitación se quedará?

—En la mía —respondo con simpleza.

Mí móvil vibra en mí bolso y no tengo que mirar la pantalla para saber de quién se trata.

—Justo estaba por llamarte —suelto una pequeña risa nerviosa.

—Que mal mientes —me regaña Ellie desde el otro lado—. ¿Se puede saber porque no se nada sobre ti desde ayer?

—Es que estaba ocupada —suspiro dramáticamente—. Ya sabes con lo de reescribí esa novela y editar la otra me tiene súper agobiada.

Mentira no toco el ordenador desde hace horas.

—Eres una mentirosa —recrimina—. Y ni creas que no me he enterado de la cita que tuviste con el azulito.

Salgo al balcón y me siento en una de los sillones. Gabriel quien ha venido con nosotros se sienta a mí lado.

—Bien ¿Y qué quieres saber exactamente? —pregunto.