6 | CHAPTER SIX.

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or primera vez en el año Andy durmió en su propia casa, incómodo, pero lo hizo. Siendo sincero consigo mismo, todo era raro, pero mientras estuviese cerca de su hermano menor no se quejaba de nada, después de su pequeña discusión Luka lo estuvo ignorando todo el tiempo, haciendo que Andy contará su paciencia.

Se levantó malhumorado una vez su alarma comenzó a sonar, tiró ésta al piso para que dejará de hacer ese maldito y detestable sonido; quedó en la misma posición varios minutos antes de levantarse a duras penas, se estiró haciendo sonar sus huesos y fue directamente al baño que estaba en el piso de arriba. Una vez listo pasó por la habitación de su hermano, cambiando su expresión al verlo con Walter felizmente sonriendo con su desayuno, puso los ojos en blanco y se dirigió nuevamente a su habitación, se vistió como comúnmente hacía para luego bajar a la cocina y comer algo antes de ir a la casa Gallagher.

—Buenos días, hijo —saludó el hombre detrás suyo con una sonrisa, Andy pasó de él y siguió haciéndose su desayuno.— ¿Seguirás con esa actitud?

—Ya te he dicho que no me llames hijo, ¿Y tú seguirás jugando al papel del mejor papá? —Andy atacó bruscamente y dió una falsa sonrisa.— Conmigo no funcionará más, no te doy ni una semana y ya estarás en el piso o en la cárcel junto con tu mejor amigo Terry Milkovich.

—Solo intento hacer las cosas bien por una vez, carajo. —soltó Walter exaltado, su hijo lo miró incrédulo.

—Pues, ¿Adivina qué? Tú maldita oportunidad venció hace mucho tiempo para mí, sólo espero que Luka se dé cuenta de lo mierda que eres —apuntó enojado, iba a agregar algo más pero vió al pequeño ya listo bajar por las escaleras.

—¿Papá me llevarás al parque? —cuestionó mirando al hombre, Andy soltó un resoplido pesado y se dirigió a la mesa.

—Claro, hijo, también puedo llevar a tus amigos. —Walter desordenó el cabello rubio del menor.

—Uh, ovviamente no —saltó el ojiverde viéndolo.— No llevarás a ninguno en el auto, menos siendo tú quién lo maneja.

Nessuno ti sta parlando, Andy. —Luka lo miró de mala manera, el nombrado se encogió de hombros.

—Está dicho, no irás con él, te vas como siempre lo hiciste junto a Debbie y Carl. —habló con severidad, se giró para agarrar su tostada y después dirigirse a la salida.

—¿Dónde vas? —le cuestionó el adulto con un tono cansado.

—Con mí verdadera familia, te esperaré allá, Luka —respondió sin mirarlos y antes de girar el pomo de la puerta habló nuevamente.— Y tienes cuentas que pagar, Walter.

«  𝐄𝐅𝐈́𝐌𝐄𝐑𝐎  »     ||      Ian Gallagher. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora