THE MAFIA QUEEN

Capitulo 2

Elena 21 años

Había sido un día largo me pase sentada la mayor parte del día en una conferencia y un almuerzo con un empresario que quería involucrarse con la fundación que había creado en Inglaterra.  The Royal Love era una fundación donde ayudábamos a niños, mujeres y ancianos a buscar nuevas oportunidades de vida, ayudamos también a las mujeres que sufrían de bulimia una enfermedad que tenía desde hace mucho tiempo.

Me había escapado del hotel donde me alojaba, había dejado a Tiny en la habitación viendo alguna serie, me deje mi vestido, tome los tacones y me escape para poder ver este país. Me puse a hacer un poco de turismo; visite algunos casinos, vi algunos lugares muy hermosos donde podía ver la riqueza que caracterizaban a Las Vegas.

Observaba el atardecer en un mirador; me sentía libre hasta cierto punto, me dio permiso de no sentir mis brazos adoloridos, Sandro me había dado una golpiza el día anterior, me sentía mal y así hice todo lo que la agenda de la princesa de gales necesitaba cumplir.

Deje escapar un suspiro y seguí caminando metida en mis pensamiento y mi sufrimiento de casi 15 años; mi mamá se había casado con Sandro cuando tenía 6 años, al principio me sentía muy bien y Sandro me trataba bien como si fuera una de sus hijas, me llevaba bien con mis hermanos excepto con Charles que era un bruto  y un maldito demente, que se desquitaba conmigo cada vez que Sandro le daba una paliza por estúpido y siempre me hacía sentir como una mierda, siempre me hizo sentir como si yo hubiera querido que me brindaran el título de su alteza real como si yo hubiera querido ser parte de una familia que daba más miedo que los presos en su peor condena.

No me di cuenta del tiempo y la distancia que camine,  hasta que llegue a un lugar que parecía ser un lugar para placer nocturno; decidí caminar al final de la calle para tomar un taxi. Cuando un hombre estúpido choco conmigo, haciendo que cayera de golpe contra el suelo.  Mierda el hombre que dios sabe que le pasa puso una mano debajo de mi cabeza para que no me golpeara, deje escapar un suspiro de terror cuando el hombre hablo, estaba ebrio lo podía escuchar y un escalofrío me recorrió sentí su rosto en el hueco de mi cuello y sentí como inhalaba mi perfume...  wow se sentía extraño.

Cuando el desconocido levanto su rosto puede verlo mejor, tenía un rostro hermoso, sexy y caliente tenía una barba de días, unos labios prefectos para besar, tenía la nariz un poco torcida como si se la hubiera quebrado más de una vez y dios...  tenía unos ojos azules intensos que me recodaba al azul de una playa en Grecia;  azul precioso donde podía perderme y sentirme libre, su cabello era otro asunto tenía el cabello negro recogido en una mini coleta, este hombre parecía ser tan intenso y caliente que me dio pesar cuando se apartó de mi, sentí que me faltaba algo. 

Lo ayudo a levantarse como pude, este hombre media por lo menos 1.85 o 1.90 metros me sentía conforme con mi estatura de 1.70 metro, pero decidí  ponerme mis tacones para no sentirme tan baja.

- ¿Seguro que te encuentras bien? -Le pregunto cuando se apoya en mi, así que le paso una mano por su cintura y ayudarlo un poco.

-Eres hermosa - Me dice mientras ponía una mano en mi mejía, me pongo un poco colorada y levanto la mirada para verle mejor, hace mucho que no miraba unos ojos como los suyos.

- Dime cara mia ¿Por qué tienes ojos tan tristes y desolados? -no sabía que contestar, así que bajé la mirada y lo sostuve mejor cuando dije.

- Voy a conseguir agua regreso en un momento...

Después de ese beso tan excitante que compartimos no me di cuenta de que me había quitado las llaves de mi puerta y que me tomaba en brazos; me dejo de pie cerca de la cama mientras él se disponía a quitarse su saco y desabotonar su camisa; dejando a un hombre hermoso con un cuerpo bello para mirar y relativamente mío por una noche solo por una noche, me dije que lo iba a disfrutar solo este pecado y deseo que se cumpla para mi esta noche, en esta vida, en esta ciudad...  La ciudad del pecado.