El hijo despreciado del Rey

Capítulo 1-Golpe de Reinado

Bajo la tormentosa lluvia desenfrenada que era como una gran tormenta, las luces del palacio estaban todas apagadas como si fuera un vacío interno.

Al entrarnos a su interior de unos de los aposentos del palacio, encontrándose en el piso una taza de té que en la cual el líquido estaba esparcido por el suelo y justamente en todo el frente de una persona parada se encontraba el cadáver de un joven apuesto ya muerto a causa de una misteriosa muerte.

Sonando fuertemente los relámpagos las luces iluminaron a la persona culpable de tal terrible accidente en la cual se trataba de una joven dama de cabellera negra y ojos altamente violetas mostrando una fría mirada en la cual al llamar a los guardias para que se llevaran consigo el cadáver.

—Ocupasen del príncipe heredero.

—¡¡¡Si!!!

Y aqui es donde ella comienza con su narración:

Mi amor y objetivo deseo *Le tiemblan las manos* Esto es por él. *Las entrelaza y con pasos firme camina hacia adelante. Entre mis pasos mirando como el piso se encontraba caberes de caballeros, sirvientes y entre algunos nobles de la corte no le paro ninguno ni siquiera al podrido olor a sangre que emergía donde el ambiente. (Hice lo que me dijo que hiciera, ahora... ¿Sera feliz?) Piensa la dama con un sentimiento de inseguridad impregnado en su pecho.

Caminando en dirección al salón del trono donde una muchedumbre de cadáveres se hallaba ya muertos en el piso en la cual ni siquiera pestaño tan solo tenía una cosa en mente. (¿Realmente... ¿El, me amara?) vuelve a pensar. observando con la mirada encontrando sentando en el trono con una espada cubierta con sangre y arropado entre hombres la capa que simbolizaba la realeza un hombre adulto con un buen cuerpo tonificado, cabello liso de tono rubio y ojos altamente azules.

— estas? _Dice el joven rubio.

La joven dama al no mostrar ninguna expresión desagradable o tristeza alguna tras haber notado el cuerpo de su padre ya muerto a un lado alzo la barbilla y abrió sus finos labios.

—Trataste con el príncipe Alfonzo... _Pregunta la dama.

Gozando de una felicidad absoluta tras haber conseguido la victoria deja salir una fuerte cargada siendo observar con una sonrisa tiránica hacia la dirección de la dama.

—María. Bien hecho.

Al verlo feliz la dama sintiéndose a gusto su corazón latía e amor por él, sus mejillas se tornaron rosadas al sentir el suave toque de sus manos en su rostro.

—¡¡Ahora es nuestro momento!! Cuando la situación este resuelta estaremos juntos.

Al abrazarla envolviéndola entre sus brazos le dice:

—Te hare la mujer más noble del reino.

—Arturo...

La alegría que sentía Arturo también era la mía, sin tan solo pudiera estar para siempre con Arturo... Pensaba la dama con gran esmero, ya que para ser una hechicera con gran poder sobrenatural era algo que muchas personas le temían.

Arturo Grenver con tan solo 26 años logro el golpe de estado y se convirtió en el nuevo gobernante del reino glonard. Sin haberse dado cuenta había pasado 10 años desde que obtuvo el cargo de soberano en la cual mantenía una larga distancia hacia su supuesta esposa la reina maría segunda, haciendo que arda un solo corazón

Solamente uno tratando de que su amor que siente se volviera como en el que tenían en el pasado, la noble dama que contribuyo en el golpe de estado se convirtió en la nueva reina obteniendo un gran poder en sus manos pero a pesar de todo lo que construyo para su esposo se dio cuenta que su cariño no coincidían y a pesar de escuchar una insólita noticia era que su infertilidad le impedía concederle un hijo cayendo asi en una infelicidad en la cual su esposo no estaba de todo satisfecho.

—Te proclame como mi reina y mi compañera, pero si no eres capaz de concebir, te volverás una cosa inútil e inservible para mí.

Esas duras palabras cayeron de golpe a los oídos de la reina en la cual fue testigo como su esposo no la quería ni ver, ni siquiera compartir tiempo de pareja, la pobre reina incapaz de concebir un heredero busco la un y mil formas para fortalecer su matriz incluso tuvo que beber pócimas para poder quedar embarazada y pedirle a su esposo que se acueste en la recamara nupcial.

—Agradece que soy un rey generoso, ya que deseo tanto un hijo contigo tenemos que mantener viva la llama de la pasión.

La reina tuvo que suprimir sus miedos al momento en que las noches nupciales con el rey fueran realmente satisfactorias ya que por su timidez al sentir el tacto ajeno le impedían satisfacer a su pareja. (Debo... Esforzarme un poco más...Si lo hago el me amara) Pensaba la reina.

Pero por mucho que lo hiciera sus sueños se vinieron bajo cuando el rey trago consigo a una hermosa e delicada flor en la cual su apariencia era totalmente angelical su cabello era plateado similar a la bronce y sus ojos tenías una hermosa esmeralda de tono verde, al traer a esa dama al castillo le dio el titulo como su segunda reina y esposa del rey.

—G-Gusto en conocerla, mi nombre es Lili. ¡Por favor trátame bien hermana!

Su voz al hablar era baja, pero a la vez delicada, rápidamente cautivo el apoyo de la nobleza con su belleza, su inteligencia en asuntos políticos y militares hicieron orgullecer al rey haciendo que su deseo de tener rápidamente descendiente para asegurar su puesto en el trono hizo aprovechar el momento en que su segunda esposa cumplirá su rol haciendo realizado su mayor sueño.

—Felicidades majestad, la segunda reina está en cinta.

Habiendo escuchado tal noticia, el rey se alegró organizando un festejo en el palacio donde hubo muchos regalos para el nuevo monarca que estaba por venir, pero no todo gozaban de la felicidad ya que la primera reina no se sentía para nada feliz con ello.