U̶n̶ ̶H̶a̶s̶t̶a̶ ̶P̶r̶o̶n̶t̶o̶ El Profesor Dea̶mon

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Revisaste la hora en tu teléfono celular, aún tenías tiempo para revisar una última cinta antes de ir a dormir, si es que lo hacías, tenías más dudas que respuestas.

El procedimiento fue el mismo, limpiar al polvo y meterla al reproductor.

La cinta empezó.

"Graduación 1993" Fueron las palabras que se vieron en la negrura de la pantalla antes de dar la imágen.

Esta vez la cámara se movía de un lado a otro buscando a alguien, había bastante bulla en el audio, el escenario era elegante pero simple, por lo visto todos se encontraban en el auditorio de la escuela primaria.

—Número de lista 9, Raina Clark—. Dijo la directiva y la niña subió por las escaleras del escenario a recoger su diploma. La castaña se notaba sería, aún así esbozo una ligera sonrisa a la cámara cuando fue enfocada por esta.

Después pasaron otros chicos y chicas irrelevantes.

—Número de lista 13—.

La cinta empezó a fallar, el carrete quedó trabado perdiendo la señal, te diste prisa en darle pausa esperando que no se hubiera dañado. Al sacarla, la cinta se escupía así misma fuera del estuche del cassette.


—Carajo—. Dijiste dejándola de lado, por tu mente pasaba la preocupación de como ibas a reparla, esa cinta valía más que el resto hasta el momento. Habías dañado algo que no debiste.

Suspiraste, ¿Cuál seguía?.

Al meter tu mano en la caja sin ver sentiste algo diferente al duro plástico de los cassettes, papel; cara a cara con ellos reconociste la firma de Kanin en tres de ellos, uno era el dibujo del búho, ya estaba de color amarillento y sus colores se habían perdido por el tiempo.

El segundo dibujo era un hombre de cabello desaliñado y de traje, con un coloreado café muy disparejo, salido de la línea y estaban impresas las huellas digitales de la chica, al pasar tus dedos por el coloreado te diste cuenta que no era cera de lápices de colores.

El tercero era un retrato de una Raina un poco más mayor, se notaba la maestría de la chica.

“20 de Julio de 1995” estaba escrito detrás, la letra era muy diferente a su firma, agresiva y violenta.

Sonreiste y llevaste el primer y último dibujo a la sala de la casa, colocándolos en la mesa de centro, planeabas resguardarlos o incluso tal vez restaurarlos.

Con los dibujos a salvo volviste al cuarto blanco donde nuevamente la sombra que te dio la bienvenida estaba ahí.

Con el cuerpo delgado de un hombre putrefacto, de grandes ojos blanquecinas y la piel pegada al hueso, y así como lo viste desapareció sumido en la oscuridad de la noche que ya había llenado la casa.

Te sentaste en el piso frente al televisor denuevo encontrando una cinta encima de él, como si aquel ser la hubiera dejado para ti.

«El Profesor Daemon» era el nombre de la cinta, el plástico de este casette era diferente, era rojizo con decorados en pintura blanca como estrellas.

Corre video.




Los árboles danzaban con el viento naturalmente frío de Villa Park, el húmedo ambiente hacia que las ventanas del auditorio se empañaran de vapor.

La chica castaña ya no tenía un uniforme café y negro puesto, ahora era un uniforme azul marino con los escudos de la escuela; observó en todas direcciones buscando dos orejas de conejo en su grupo, encontró unas de mapache, otras de zorro, unas de huron e incluso una persona que tenía una televisión como cabeza, pero la presencia de Kanin no estaba por ningún lugar visible.

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⏰ Última actualización: Aug 07 ⏰

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