La Luz y La Oscuridad

~ Fairy y Eli ~

Oscuridad.

Lo único que aquel niño veía día y noche dentro de aquel lugar que parecía infinito, intento salir muchas veces pero nunca encontró una salida.

Se rindió.

No esperaba salir realmente de aquel lugar así que solo podía llorar y llorar todos los días hasta que su sufrimiento parara.

Quizás nunca pararía.

- Te dijeron muchas cosas, verdad? -

Hablo su reflejo.

- Quizás tengan razón. -

El niño no contesto. Ignoro a su compañero que solo le recordaba las cosas horribles que las personas que lo encerraron ahí le decían.

- Te rendiste buscando una salida. Eres un inútil! Así planeas salir? -

Sin respuesta.

- Ignorándome no me callaras, nunca nadie te amo y nunca nadie te amara. -

El silencio del niño se convirtió en pequeños sollozos que intentaba callar.

- Y vuelves a llorar, no sabes hacer algo más? Llorando no arreglaras nada. -

El niño se fue corriendo del lugar, aunque correr nunca lo alejaría de las palabras de su reflejo que siempre lograba encontrarlo sin importar cuanto corra.

Sus palabras dolían, y dolían porque sabia donde golpear, en aquellas pequeñas debilidades que en un niño tan pequeño podían ser horribles de afrontar.

Dejo de correr y miro a su alrededor.

Nada.

Como siempre.

No había luz, no había movimiento, solo estaba él y su reflejo, aunque realmente no recordaba como se veía la luz o el cielo, no recordaba siquiera como se sentía el viento.

Claro que quería salir de aquel infierno, pero cuando eres un "inútil" como podría siquiera entenderlo? Era un espacio infinito lleno de oscuridad, su forma de funcionar y significado no podría entenderlo un niño tan ingenuo.

Esperar que lo salven era estúpido porque él "nunca fue amado" y "nunca lo amaran" entonces ¿Quien lo buscara?

- Nadie. -

Susurro entre lagrimas.

Se recostó en el suelo, sentía frio, pero estaba cansado y quería cerrar los ojos para al fin poder dormir en paz, aunque sabia que las pesadillas lo iban a alcanzar.