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En un cerrar de ojos ya era un lunes nuevamente, odiaba los lunes. La verdad no me gustaba levantarme temprano.
Frote mi rostro con mis manos mientras extendí mi brazo para apagar la bulla de la alarma, eran las 5 de la mañana. Usualmente me levantaba a las 6, pero como ahora vivía "sola" tenía que levantarme a hacer de comer, aunque eso ya lo hacía anteriormente. Aún tenía bastante sueño, me quedé mirando al techo por unos minutos hasta que decidí levantarme, prendí la luz de el pasillo para bajar a la cocina, hoy no amanecí con tanta hambre por lo que solo me haría un pan con mermelada de mora y un café, era algo sencillo, pues me había quedado haciendo tarea hasta las 11 de la noche.
Espere a que el pan se calentara mientras buscaba el café.
Busque un vaso y lo deje listo, mientras el desayuno estaba volví a subir a mi habitación a buscar un suéter, pues estaba haciendo frío. Fui al cuarto de limpieza, ahí estaba la lavadora, coloque algunas sábanas que encontré, me servirían por lo cual tenía que lavarlas primero antes de usarlas.
Volví a la cocina, puse un poco de café en la taza y el pan con mermelada también.
Agarre mi celular para distraerme en lo que desayunaba.
Termine, lave los trastes y subí a bañarme.
Estaba esperando a que el agua se calentara mientras abrazaba mi cuerpo desnudo. Toque el agua y entre, el agua estaba tibia, termine de asearme y envolví una toalla en mi cuerpo, con otra iba secando mi cabello.
Por suerte este día no tendría clases en si, pero tenía que entrar tareas, el día de hoy solo nos enfocariamos en preparar la escuela para un evento que tendríamos. Por lo cual podría ir con el uniforme deportivo, busque mi uniforme y comencé a cambiarme. Cepille mi cabello y luego simplemente me puse algo de crema en la cara y manos.
Arregle mi mochila y mire el reloj, ya era tiempo de irme, tenía el tiempo justo para llegar, hoy iría caminado así que estaba bien.
Me asegure que la puerta tuviera seguro y sali de casa.
La mañana estaba fría y pronto mi piel se erizo, ya había gente circulando en las calles a esta hora.
Mientras más me acercaba a la escuela habían más personas, incluso grupos de chicos y chicas yendo a la escuela.
Al llegar simplemente fui a entrar los trabajos que había hecho y mientras me dirigía al salón alguien tocó mi hombro.
Gire a mirar de inmediato.
—Oh, buenos días maestra— hable.
—Buenos días, necesito que me ayudes en algo— acomodo sus lentes.
—Aaa....— la verdad no quería ir con ella porque ya sabía cómo eran sus favores con ella —De hecho tengo algo que hacer en este instante— menti y trate de alejarme.
—Es urgente— tomo de mi brazo.
—Tengo que estudiar el discurso...— no termine de hablar porque ya me estaba jalando del brazo llevándome con ella.
Genial, ahora estaba metida en más trabajo, como si no bastará con el que tenía.
En menos de 5 minutos ya estábamos frente a un salón, aunque no era un salón, más bien era el área donde se encontraban los talleres de la escuela.
