La chica del Dragón [TERMINADA]

Capítulo 46. Sinceridad.

Capítulo XLVI. Sinceridad.

Katsa caminaba furiosa, sacudiendo su sudadera con la excusa de quitar toda la tierra y hierba que pudiera tener, pero lo cierto es que ya lo había hecho hacía más de cinco minutos, cuando comenzó a caminar.

Estaba furiosa y ni siquiera sabía del todo por qué, no sabía si para con ella misma o para con Drake. Con Selene sabía que no, ya que ella lo único que había hecho era decirle la verdad, como hacía siempre. Al menos desde que le contó toda la verdad sobre ella y sus poderes.

Caminaba sin mirar atrás por el camino por el que había ido con Drake, el camino de tierra que, si lo seguías todo recto, te llevaba al lujoso chalet. Por un momento pensó en seguir el camino hacia delante en lugar de caminar hacia el coche de Drake y dar la espalda al chalet, pero no podía hacerlo, aquello no era nada suyo, no podía hacer lo que quisiera.

Así pues, poniéndose de nuevo la sudadera, ya que tenía frío, comenzó a caminar hacia el coche de Drake mientras golpeaba con el pie cualquier piedra que se le pusiera por delante. Prefería golpear piedras en el camino a pagar su frustración con personas, o con ella misma.

Mientras caminaba lentamente, ya que en parte no quería llegar al coche de Drake y marcharse, se miró la mano derecha, la mano en la que se había quedado contemplando el fuego que había salido de ella.

Cuando lo hizo, contemplar el fuego, no supo por qué razón había pensado en Logan en ese momento, pero, contemplándose de nuevo la mano, sin fuego en ella, y pensando en un posible motivo, dio con él, dio con el motivo.

Al haber creado fuego ante el claro ataque que iba a sufrir del jaguar melánico, ella pensó que el fuego había aparecido para que ella pudiera defenderse, como había ocurrido con el pequeño temblor, aunque lo suficientemente fuerte para desequilibrar al jaguar melánico, que había provocado y había hecho su aparición en ella casi de un modo involuntario, sin embargo, en ese momento recordó lo que una vez Selene le dijo, que sus poderes estaban conectados a sus sentimientos y emociones. Si había sido capaz de provocar ese pequeño temblor, había sido porque en ese momento había sentido miedo. Si había creado fuego en sus manos, creyendo que había sido para defenderse del ataque del jaguar melánico, había sido porque en ese momento, incluso aunque ella misma no se hubiera dado cuenta, había sentido ira, ira porque el jaguar melánico la atacara y ella no pudiera defenderse.

Ya sabía el motivo verdadero por el que había creado el fuego en sus manos, el cual le llevó directamente al motivo por el que había pensado en Logan. Él había sido quien más la había apoyado a la hora de crear fuego cuando Selene se lo pidió tras salir del Hospital, y por él, en muchas ocasiones, había llegado a sentir ira, pero no hacia él, sino hacia las personas que pudieran atacarlo a él para hacerle daño a ella. Como bien podía ser Alessia.

Katsa bajó de nuevo la mano y, parándose en seco un momento, comprendió que, si quería ser capaz de controlar totalmente sus poderes, debía antes aprender a controlar sus sentimientos y emociones dependiendo de la situación en la que se encontrara. Le iba a costar y era consciente de ello, pero debía hacerlo si no quería que le ocurriera lo mismo que le había ocurrido frente al jaguar melánico en un combate de verdad, donde su vida sí peligraría.

Comenzó a caminar de nuevo, lentamente y dando patadas a las piedras, cuando pequeñas gotas de agua comenzaron a caer sobre ella. Estaba comenzando a llover.

A Katsa la lluvia le encantaba, pero, en aquel momento, lo menos que quería era resfriarse o constiparse y tener que suspender las vacaciones por su culpa, lo cual implicaba no poder entrenar ni poder tener una excusa para estar con Logan.

Mientras se ponía la capucha de la sudadera, comenzó a caminar más rápido hacia el coche, el cual ya podía ver aunque fuera en forma de pequeño punto lejano.