Como Patrick rescató al raro chico nuevo de su propia casa.

Capítulo 11: Aprovechemos que mañana me voy

Es domingo y por alguna razón que Satán debe conocer, el día está soleado y el clima es bastante cálido, es entendible que haya cambios climáticos por la contaminación ambiental y eso pero mierda, es invierno, se supone que debería hacer frío. 

Patrick había ido a la tienda a comprar más café y cuando regresó estaba empapado en sudor, llevaba puesto un abrigo enorme y también una bufanda, desgraciadamente, se apresuró a entrar al baño para darse una ducha, al ver su reflejo en el espejo notó que sus mejillas estaba completamente rojas y varios mechones de cabello estaban adheridos a su frente, se metió bajo la ducha maldiciendo constantemente el estúpido clima cambiante y su estúpido organismo que lo hacía sudar en exceso.

Para cuando Pete bajó a la cocina a desayunar, todavía en pijama, Patrick ya se había recuperado del repentino golpe de calor y estaba de un mejor humor.

-Hey Pete, ¿Quieres ir a ver una película hoy?

El moreno hizo una mueca de desgano mientras batía su café.

-Vamos Pete... -insistió el rubio -es un lindo día.

-Eso dijiste ayer y terminé congelándome el culo en la fuente.

-Pero esta vez es verdad, ve a comprobarlo si quieres.

Pete lo dudó por un momento, puesto que todavía llevaba puesto el pijama, pero terminó accediendo, de todas formas si es que realmente hacía frío afuera podía usarlo como excusa para pasar el resto del día en cama jugando con la PS de Patrick. Pero al abrir la puerta se dio cuenta de que Patrick tenía razón, por algún motivo era un estupendo día, era un buen día de sol, las parejas de la mano mostraban todo su amor(8) ah salía cantando guasones nada que ver

En fin, ¿Qué mierda pasaba con el clima?

-

Tyler había estado dando vueltas por su casa, ansiosamente hasta el momento en que Josh llegó, se sentía completamente recuperado y lleno de energía y afuera el sol brillaba y en su mente todo parecía perfecto.

Hizo pasar a Josh y prácticamente lo arrojó encima del sofá para luego sentarse en su regazo y besarlo cortas y repetidas veces en los labios. -¿Qué película vamos a ver? -Preguntó, rápidamente incorporándose y dando pequeños brinquitos en el lugar, francamente parecía un niño hiperactivo que acababa de terminarse una caja de chocolates.

-No lo sé, supongo que puedes decidirlo cuando estemos allá.

-Oh... Oh... sí, buena idea.

-¿Por qué estás tan exaltado? 

-Pasé dos días tirado en la cama, tengo toneladas de energía para gastar -explicó mientras caminaba de una punta a otra de la sala.

-Oh... tiene sentido, entonces vayámonos ya así no gastas tu energía antes de caminar hasta allá.

Tyler asintió y se le adelantó unos cuantos metros en la salida, mientras caminaban se volvió hacía él y comenzó a contarle historias que había leído cuando era niño, ninguna completa y a una velocidad demasiado alta como para entenderle, Josh estaba preocupado de que fuera a tropezar o a chocarse con algo si continuaba caminando hacia atrás así que lo obligó a detenerse.

-Ty es genial que tengas tanta energía y todo pero me pone nervioso que no veas por dónde estás caminando.

-Oh no te preocupes Josh, no necesito ver por donde voy.

Josh suspiró resignado, sus argumentos no podían contra Tyler y sus "superpoderes" 

Al llegar al cine Tyler se quedó viendo los dulces en la estantería por largo rato, esperando que Josh se ofreciera a comprarle algo, pero Josh no iba a arriesgarse a poner más azúcar en su sistema, se limitó a comprar palomitas, con sal, y arrastrar a Tyler dentro de la sala para que se sentara y se quedara quieto, y casi funcionó, claro si exceptuabas el constante compás que marcaba con sus pies en el suelo.