Mayo.
El mes de mayo anunciaba un evento importante, el próximo fin de semana se celebraría el día de las madres, este sería el segundo año donde Taylor podría decir que ella era una de las festejadas, el primer domingo del mes, siempre era el elegido en el calendario estadounidense.
—Papi, yo— Charles ya hablaba más, al igual que Evie, el vocabulario que los mellizos tenían se extendió, el pequeño se tapaba la cara tratando de contar para que su padre y hermana se escondieran.
—Bien, Charlie, es momento de que cuentes, pero recuerda, no debes hacer trampa— Travis jugaba con sus hijos a las escondidas.
Evie salió corriendo, ella era la mejor en esconderse, era sorprendente como una niña de su edad encontraba los mejores escondites.
El niño empezó a contar los pocos números que sabía. —Uno, dos, tres, cuatro... Cinco, seis, siete...—
Taylor vio pasar a su hija que corría como si alguien la persiguiera. —¿Evie? —
Kelce pasó también, riendo. —Nena, calma, nos escondemos de Charlie— se fue corriendo.
A la rubia le daba risa como es que su gigante esposo se iba a esconder, ¿Acaso cabía en algún sitio?, le divertía pensar donde se escondería.
En el momento que Charles terminó de contar, corrió en la planta baja buscando a su papá y hermana. —¡Mami! — se topó con su mamá. —Encontré—
—Si mi amor, me encontraste, pero yo no jugaba— rio y le dio un beso. —Continúa buscando por allá— le señaló.
Se fue corriendo.
Travis al ser un hombre tan alto, no podía encontrar un escondite tan fácil, así que de todos modos dejaría que su hijo lo encontrara un poco más rápido, se escondió detrás de la puerta de la sala de televisión.
Charles estaba buscando a su papá primero, en su mente, sabía que él era más rápido de encontrar, además de que quería atraparlo a él antes, caminó por la planta baja en las pocas habitaciones que se encontraban con la puerta abierta debido a su hermanita, que le gustaba meterse y sacar todas las cosas o hacer travesuras, al ver la puerta de la sala de televisión abierta, entró cauteloso para buscar a alguien, dando pasos en silencio y riendo al mismo tiempo, cuando llegó hasta el fondo de la pieza, se dio la vuelta y vio que su papá estaba detrás de la puerta, parado de espaldas, era obvio que Travis sabía que Charlie ya lo iba a encontrar, así que se iba a hacer el sorprendido.
—¡Papi!, ¡Encontré! — el niño corrió a donde estaba su papá, contento de haberlo encontrado primero.
—¡Me encontraste, Charlie! — Kelce alzó las manos en señal de atrapado.
Él lo abrazó feliz.
Travis le devolvió el abrazo. —Vamos a buscar a Evie— le dijo animado, tomando su mano para hacerlo juntos.
Salieron de la pieza, caminando hacia la siguiente, que es donde se encontraba un minibar, con todo cerrado para mayor seguridad, las botellas y cosas no aptas para niños se hallaban bajo llave, lo único que se podía ver era una mesa de billar y algunos muebles alrededor donde amigos y familiares podían reunirse algunas veces ahí, al entrar, Charlie caminaba despacio.
—¿Dónde estará Evie? — su pregunta era real, esa niña se podía esconder por al menos cinco horas seguidas.
—Shhhh— Charles lo silenció, no quería que su hermana supiera que la buscaban.
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Eres mi juego final
FanficTaylor y Travis, después de un año de relación, se han convertido en padres de sus mellizos Evie y Charles, encontrándose con nuevos retos ante una paternidad bastante sorpresiva pero muy deseada, ¿Qué es lo que le depara a la famosa cantante y el j...