El dia que enamore a mi idolo

Entre canciones y confusion

NARRA JOE
Ya era hora de salir al escenario, y mi mente no dejaba de dar vueltas. ¿Qué canciones le dedicaría? ¿Cómo reaccionaría? ¿Qué pasaría después? Tenía que concentrarme y confiar en que todo saldría bien.
Salimos al escenario, y enseguida la vi. Estaba ahí, en primera fila, con una sonrisa tan hermosa que casi me hizo olvidar el nerviosismo. Le dediqué una sonrisa antes de empezar a cantar. Cuando llegó el momento de What a Man Gotta Do, decidí cantársela. Esa canción me recordó la primera vez que la vi ayer; supe al instante que quería conocerla.
Por suerte, Nick comenzaba esa canción, lo que me permitió observar cómo él le cantaba mientras ella le devolvía esa sonrisa especial. Al llegar mi turno, le hice una seña a Nick para que cambiáramos de lugar. Quería acercarme a donde estaba Sara y cantarle mi parte directamente. Así pasamos toda la canción, turnándonos, dedicándole cada verso. Ella simplemente sonreía, sacaba fotos y nos grababa, disfrutando del momento.
Al cabo de unas canciones, llegó el momento de When You Look Me in the Eyes. Esa canción era mía para comenzar, y no dudé en acercarme. La miré directo a los ojos y canté. Sus ojos brillaban como nunca, y eso me dio esperanza. Tal vez, solo tal vez, ella sentía lo mismo que yo. Pero justo cuando estábamos completamente conectados, Nick vino a interrumpir. Con su típica actitud confiada, me hizo a un lado y comenzó a cantarle. Tenía que hacer algo; necesitaba que volviera a enfocarse en mí.
La oportunidad perfecta llegó con Gotta Find You. Sabía que era una de sus canciones favoritas porque, durante nuestro almuerzo, ella misma me lo había confesado. Me dijo que si alguien se la dedicaba, se enamoraría perdidamente. Decidido, la invité al escenario antes de la siguiente canción.
—Antes de continuar, quiero invitar a alguien especial al escenario —dije, mirándola directamente—. La conocí ayer y quedé completamente encantado. Quiero dedicarle esta canción, que sé que es su favorita. Sara, ¿puedes subir?
Ella me miró sorprendida. La ayudaron a subir, y al llegar me dio un abrazo que correspondí sin dudar. Tomé su mano, mirándola directo a los ojos, y comencé a cantar. Su sonrisa iluminó el momento, y una lágrima resbaló por su mejilla. No pude evitar limpiarla con mi mano, acariciando su rostro suavemente. Era como si el mundo entero desapareciera; solo estábamos ella y yo. Al terminar la canción, nuestras frentes estaban juntas, mirándonos y sonriendo. Fue un momento perfecto... hasta que Nick vino a separarnos.
—Bueno, bueno, Sara —dijo con su típica sonrisa—, necesito que te quedes en el escenario porque yo también quiero dedicarte una canción.
Sara asintió, un poco confundida, y me miró de reojo antes de que yo me apartara. Nick comenzó a cantar Introducing Me, otra de sus canciones favoritas. Me llenó de rabia porque sabía que ella había dicho algo parecido de esa canción. Mientras la cantaba, Sara no podía contener la risa por los gestos que hacía Nick. Al terminar, él la abrazó y le dio un beso en la frente. Apreté los puños y los dientes, furioso.
Sara me miró de nuevo, esta vez con una expresión apenada, y le susurró algo a Nick antes de volver a su lugar en el público. El resto del concierto me sentí perdido. Tenía que hablar con ella, aclarar lo que sentía. Necesitaba estar con Sara.
NARRA SARA
Estaba con mi celular hablando con mi hermana, contándole todo lo que había pasado con Nick, cuando de pronto los chicos salieron al escenario. Se me hizo súper rápida su salida. Pude ver que Joe me estaba mirando, así que le sonreí, y él me devolvió la sonrisa.
La noche fue mágica desde el inicio. Cuando comenzaron a cantar What a Man Gotta Do, Nick me miró directamente y empezó a cantarme. No podía evitar sonreír; estaba tan lindo, tan perfecto. Pero luego vi que Joe le hizo una seña a Nick, y cambiaron de lugar. Ahora era Joe quien me cantaba, mirándome con una intensidad que me hacía sentir como si estuviera soñando.
Todo era una locura. Joe y Nick parecían estar turnándose para capturar mi atención. En When You Look Me in the Eyes, Joe me miró directo a los ojos mientras cantaba, y sentí que no existía nadie más en el mundo. Pero entonces, Nick interrumpió, tomando su lugar, y volvió a cantarme con esa energía juguetona que me hacía reír. Era como estar en una rueda girando sin parar.
Pero nada me preparó para lo que ocurrió después. Joe me invitó al escenario antes de cantar Gotta Find You. Su invitación me dejó sin palabras. Me ayudaron a subir, y él me abrazó antes de tomar mi mano y mirarme directamente a los ojos mientras comenzaba a cantar. No pude evitar emocionarme. Una lágrima escapó, y él la limpió suavemente, acariciándome la mejilla. Por un momento, todo se desvaneció; solo estábamos él y yo.
El momento era perfecto... hasta que Nick interrumpió.
—Bueno, bueno, Sara, necesito que te quedes en el escenario porque yo también quiero dedicarte una canción —dijo con una sonrisa.
Asentí, aunque estaba confundida, y le eché una mirada a Joe antes de que se apartara. Nick empezó a cantar Introducing Me. Al principio, estaba dispersa, pero luego no pude evitar reírme con los gestos graciosos que hacía. Nick tenía una energía única que también me hacía sentir especial. Al terminar, me abrazó y me dio un beso en la frente, como el día anterior. Me sentía tan confundida.
—Debo volver a mi lugar —le dije.
Nick asintió, y mientras bajaba, miré a Joe. Su expresión me partió el corazón. Necesitaba hablar con él.
El resto del concierto fue extraño. La tensión entre ellos era evidente, y yo no podía dejar de pensar en ambos. Sabía que, cuando terminara el show, las cosas no podían quedarse así. Tenía que hablar con Joe.

Que pasara, que pasara, a quien elegirá Sara.
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