¿A dónde vas? no corras que tiempo sobra, tenemos toda una vida para llegar, no mires el reloj de nuevo, los que viven apurados siempre llegan tarde a lo que sienten y ser impuntual al corazón es una falta a tu esencia, ¿A dónde vas cuándo los días no tienen colores? que el miedo no te haga volver atrás, porque no vas a saber hasta donde pudiste haber llegado, ¿Hasta donde llegaste? mírate hoy, míranos hoy, míranos ayer.. Hoy no estás conmigo, pero yo estoy con vos y te impulso a seguir, mira siempre adelante, lo que pasó ya pisado está, pero hasta eso, que supo haber tiene raíces fuertes, que enredan nuestra pasión y la desparraman por tu alma azul.
De acá me voy con vos y si te vas, llevame, porque ya no se por donde pisar, ni por donde mirar, tus claros ojos eran el camino a seguir y se apagaron para mi, chocamos en el mismo lugar y decidieron seguir su propio sendero, el uno y el otro ya no son dos, pero supieron ser uno, esas cosas que pudieron ser ya no serán, pero, aprendimos que dos rutas lejanas se pueden cruzar y que en una calle cualquiera nos podemos perder, porque el amor es una cosa que no tiene límites, cuando toma carrera no hay semáforo en rojo que pueda frenarlo y así rompemos nuestras veredas, agrietamos el camino que costo llevar, pero no construir, porque nunca llevamos los hilos de nuestros pasos, si no que tus raíces y las mías supieron ser el roble más fuerte y tomar el timón por los dos, ya no había decisiones que tomar, había emociones que sentir, porque nosotros eramos espectadores de nuestros peores errores y protagonistas de nuestras incoherentes alegrías, vos tan para atrás y yo tan en diagonal, porque uno de los dos tenía que romper con lo convencional, atrás o adelante son direcciones nomas, el ayer y el mañana y quedarnos parados es el hoy, pero es no avanzar, por eso decidí irme en diagonal, como un globo, porque había que soltarnos, había que comenzar un nuevo camino y cual globo podía verte desde arriba, retroceder para recordar y avanzar para seguir con tu vida, por eso elegí subir en zig zag también y bien sabes que vuelven a caer, a veces rotos y otras solo desinflados y por ahí quizá me atrapas, una vez más.
¿De qué sirve mi canto, si no es del corazón? porque cantar no son sólo palabras, es una historia que contar, son encuentros y desencuentros y lo que el corazón grita, nadie lo puede callar, es imposible de silenciar el eco que provoca, porque rebota de un corazón a otro, haciéndolos sonar como campanas, yo perdí la mía, pero una calle rabiosa supo compartir la suya conmigo y con eso pude entender, que en el lugar menos pensado puede haber felicidad.
Lejos de ser lo que supimos ser, convertí ese amor en temor, y me arrinconé en un costado en mi vereda, las dudas me taparon el sol como nubes de otoño, traicioné todo lo que te enseñé y me siento mal por ello, el amor debía ser amor, pero lo encadené para ya no dejarlo salir de nuevo y ahora me repliego del dolor, me refugio en mi guarida sin moverme, pero no puede terminar así, no iba a dejar que todo lo vivido se convierta en una ruina permanente, así que me paré y para adelante eché a caminar una vez más, ya no estaba cerca de tus calles, pero estaba siguiendo las mías y de una autopista me sorprendí, no pensé que podían mezclarse así, pero comprobé que todas terminan por agrietarse aún más que nosotros, no por fuera, si no por dentro y mueren de pie, con una falsa creencia del amor, no supieron ser un roble que dure cien años ni sus raíces se enredaron, entonces se secan sabiendo que nadie va entender que un árbol existió acá, que sus raíces no llegaron hasta allá y sus calles vacías están ahora mismo, sus veredas impecables de fisuras, pero llenas de angustia, de no saber que es dar y recibir.
Por eso seguí echándome a andar más lejos todavía y llegué a un cruce lleno de globos, no fui el único, varios eligieron flotar en diagonal y caer a destino incierto, sabían que no era algo seguro porque caer siempre es ir hacia abajo, pero no de ir abajo hacia atrás, si no abajo de no se donde voy a ir parar, es un salto en el tiempo y espacio, podes llegar lejos y encontrar nuevas rutas o podes simplemente caminar y que el camino te encuentre a vos, es lo que elegí y así me voy a secar, hasta que mis hojas caigan y mis ramas se quiebren, sin apurar ni acelerar, que nada en realidad importa, solo el beso del final.
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Es Sentir
Short StoryEl amor no es una ciencia exacta y el dolor suele ser un misterio. ( Fragmento del tema "Andar" de Andando Descalzo)