𝕴𝖓𝖉𝖎𝖌𝖓𝖔 𝖉𝖊 𝖙𝖚 𝖆𝖒𝖔𝖗 {𝖘𝖔𝖚𝖐𝖔𝖐𝖚}

Prologo

Pov Dazai

¿Cómo es posible que después de tanto tiempo nos veamos con ojos llenos de odio y rencor, que nuestras conversaciones solo se llenen de gritos y golpes?

Mi ser se rompe por completo al ver cómo tus ojos arden con desprecio cuando se dignan a mirarme, cargados de un rencor que parece no tener fin. Si algún día debo ser juzgado por mis actos del pasado, debo decir que lo único de lo que soy culpable es de amarte con locura y desesperación. Anhelaba tanto tu atención que te convertí en algo de mi propiedad.

Donde antes hubo sentimientos, tal vez mutuos, ahora solo hay tristeza, una tristeza que desearía borrar para poder escuchar tu voz de nuevo cada día. Desearía poder retroceder en el tiempo para ser digno de tu amor.

Cada vez que te veo, me siento más indigno de siquiera poder mirarte a los ojos, un tormento vivir siendo indigno de tu amor.

Pero sé que es imposible, que ya no hay marcha atrás, que lo que hicimos y lo que dijimos nos separó para siempre. No puedo olvidar la última vez que te vi, cuando disparaste esa mirada llena de odio y me dijiste que nunca más querías verme; fue como si arrancaras mi corazón y lo pisotearas sin piedad. No supe cómo reaccionar, me quedé paralizado y mudo, dejándote ir sin expresar lo que sentía, lo que siento, lo que siempre sentiré por ti. Te amo, Chuuya, más que a nada en este mundo. Aunque sé que no me perdonarás, aunque sé que no me amas, aunque sé que soy indigno de tu amor, quiero que sepas que siempre estarás en mi mente, en mi alma, en mi vida.

Anoche tuve un sueño, un regreso al pasado, cuando éramos jóvenes de quince años. Éramos rebeldes, inocentes, dispuestos a vivir aventuras y sentirnos libres. Reíamos, peleábamos, nos abrazábamos, nos mirábamos con curiosidad, admiración, cariño en ese sueño nos besábamos torpemente, con pasión, con amor éramos felices, éramos nosotros, éramos uno. Pero entonces el sueño terminó, y desperté solo, en una habitación fría y oscura, sin ti a mi lado, sin tu calor ni tu luz. Me di cuenta de que todo había sido una ilusión, una mentira, una tortura de algo que quise vivir. Porque tú ya no estás, porque tú ya no me quieres, porque tú ya no eres ese chico que alguna vez pudo amarme y yo ya no soy aquel que te lastimo, aunque soy un idiota por todo lo que te hago, como te explico que sin ti solo hay oscuridad.

La vida es tan efímera que nos sorprende cuando se acaba espero que la muerte pueda hacer que te olvide, porque ya no podré verte.