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"... Actúas como si fueras Dios, te fuerzas demasiado... "

—Ya lo has visto. —Carlisle, de vuelta a su oficina con André detrás de él, siente la ansiedad pinchar su piel. —¿Cuál es tu decisión? —pregunta.

Luego de su pequeño encuentro por la noche, André no hizo más que anunciar su presencia, explicando la razón por la que estaba allí. Y que, cuando viera a la niña por la mañana, tomaría una verdadera desición sobre qué hacer. Ahora que estaba de vuelta, había tomado el control que le pertenecía sobre los Vulturi.

Por supuesto que a Aro no le encantó la idea, pero ¿Tenía otra opción?

...

Cuando Volterra estaba apenas saliendo de la miseria de su antiguo gobierno, uno de los primeros humanos que el clan Vulturi convirtió, fue Aro. Antes de él, los vampiros que se mantenían en la fortaleza habían venido de otros lugares. Aro era perspicaz, descubrió lo que eran y André pensó que tendrían que asesinarlo, Baza lo hubiera hecho en un segundo, pero Zestial lo detuvo. Entonces Aro explicó sus intenciones ante su descubrimiento. Él no quería exponerlos ante el resto, sino formar parte de ellos. Deseaba pertenecer a algo más grande que la vida que se le había dado entre los aldeanos.

Y Zestial se lo concedió.

—Hermano, ¿Estas seguro de esto? —André, en la biblioteca que usaban como base de reuniones, le preguntó a su hermano.

—Si. —Zestial apenas le prestaba atención, distraído en sus propios libros.

—Zes... —André se acercó hasta su hermano, tomando uno de los mechones de su largo cabello. —¿Es otro de tus experimentos? —cueationó. —Sabes lo peligroso que es.

Zestial, ante el toque y palabras de su hermano, finalmente le miró. —Piensalo, André. —le sonrió como alguien que tiene un plan. —Todo un clan creado desde cero por nosotros.

—¿Piensas convertir más personas? —Baza, que había mantenido silencio, se acercó con una expresión de desconfianza. 

—No mientras tengamos el control. —Zestial aseguró. —Lo cual conseguiremos si nosotros los convertimos. Tenemos ese poder.

Era cierto, Zestial había descubierto que los humanos que alguno de ellos convertían en vampiros (mediante sus propios experimentos) podían destruirlos con la facilidad con que alguien chasquea los dedos. Su veneno funcionaba con una clase de detonante que podían activar con facilidad. Sería como hacer estallar una taza. Además, ser mordido por un vampiro puro garantizaba la obtención de un don.

—Y si ese vampiro convertido muerde a otro humano, podremos controlarlo también. —su veneno se propagaria como un virus, tendrían el control de cada vampiro, siempre y cuando fuera mordido por ellos o por alguien que hubieran convertido.  —Es un plan sin falla. Si se vuelven en nuestra contra, los asesinamos a todos.

—No me gusta esto.

—¡Vamos, Zalin! —Baza lo atrapó en un incómodo abrazo. —Intentemos ser Dios.

...

Aro nunca podría negarse a sus órdenes por miedo. Y aunque pensara en asesinar a André ahora que no tenía a sus hermanos, el chico siempre iba un paso adelante. La gran parte de los vampiros de Volterra seguían fieles a ellos, la otra parte les temía. Y en cualquier caso, no dudaría asesinar a todos antes de que llegaran a tocarle un mechón de cabello.

Le pidió a Aro hacerse cargo del caso de los Cullen, pero sin revelar por qué su interés en ellos. Tampoco le contó lo sucedido en Londres o su desaparición todos esos años.

"Vulturi" | Carlisle Cullen [BL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora