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Moa pov:

Realmente mis hijos eran niños increíbles, con apenas cinco años sabían leer las situaciones rápidamente y actuaban guiados por lo que les dictaba el corazón, siendo niños muy sentimentales. A pesar de mi inseguridad sobre si estaría siendo una buena mamá para ellos sabía que estaba haciendo todo lo posible porque tuvieran una linda infancia y fueran felices, tal y como mi madre había hecho conmigo.


-Ay dios, ya me llené- me recliné en la silla -La estación mamá se cierra, no me da la boca para más panqueques- sonreí y miré a mis hijos.

-Y eso que apenas y fue un plato cariño- Suzuka levantó la mesa alrededor mía -Niños vayan a lavarse los dientes y a prepararse la ropa, toca baño-

-¿Puedo llevar el barquito que el tío Yuki me regaló?- Kenji se bajó y dio pequeños saltitos -Porfis- hizo puchero y juntó las manitos.

-Solo un juguete bebé, después no quieren salir porque se la pasan jugando en la bañera- sonreí y le besé la cabeza -Andando- lo despeiné y los dos fueron derecho a sus habitaciones.

-Después podemos nosotras usar la ducha, hace mucho que no te disfruto desnuda como corresponde- Suzuka susurró contra mi oreja, el soplo caliente produciendo un escalofrío en mí -¿No te parece que ya podemos ponernos en busca del tercero?-

-Cariño por favor- reí nerviosa y la miré roja.

-Oigan par de pervertidas no necesitamos escuchar lo que planean hacer- Momoko nos tiró una servilleta -¿O quieren que mis sobrinos sepan como se hacen los bebés de forma explícita?-

-¿Y qué hay de mi ahijada?- Suzuka levantó una ceja y la miró -Te recuerdo que su habitación está junto a la suya y cuando creaban a Minato se escuchaba perfectamente- golpeó varias veces la mesa.

-Ay cállate, la niña no hizo preguntas ni nada- Kano se puso roja -Y tampoco había que recordarlo-

-Parecía que estaban armando al bebé, no tratando de hacerlo llegar al útero- Su siguió con sus comentarios y yo no pude evitar reír.

-Ya cállate imbécil, te llega más sangre a los huevos que a la cabeza al parecer- Momoko le frunció el ceño.

-¿Quién tuvo dos de primeras? Esta Alfa amiga mía- se puso a hacer un baile.

-Ya basta ustedes dos, me sorprende que sean maduras con los niños y entre ustedes no- negué y las miré divertida -¿Quién las entiende?-

-Moa pensé que sabías que la madurez es nada más algo de las frutas y verduras- Momo me sonrió -La carne no, se pudre-

-Y así terminan- Kano negó y me miró -Si estas dos enloquecen nos vamos ¿Ok amiga?-

-Te acompaño a donde sea- choqué los cinco con ella, riendo al escuchar las quejas de ellas.

-Las sigo porque no las voy a aguantar- Yui se nos unió abrazándonos por los hombros -¿Me van a dejar aquí con estas dos?-

-Y trae a Miko, creo que bastará un poco más de tiempo aquí para que ella se vuelva igual de especial que nuestras Alfas- Kano le guiñó el ojo.

-Oigan estamos aquí- Su hizo un adorable puchero -¿Me vas a dejar?- me agarró de la mano y me miró con ojitos de cachorro.

-Ya veo de donde sacaron los niños la habilidad del pucherito- reí y le di un tierno beso -¿Vas a enseñarles medidas de persuación?- levanté una ceja.

-Serán estrellas- me soltó y envolvió sus brazos alrededor de mi cintura -Coquetos igual que yo- besó mi mandíbula y empezó un recorrido hasta mi cuello.

Feromonas y Heroína (TEMPORADA DOS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora