Versión: Weimar x Zarato Ruso
Va de la mano con el one shot <put* alcohol>
¡NSFW!
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- ¿Pero qué le has echado a esta cosa? Vaya verde fosforescente - comenta luego de ver la margarita que el alemán le había servido
- ¡Es una receta que vi por esa cosa que llaman Internet! Dale, dale. Tú serás el primero en probarla y me dices que tal
Al ver la emoción en la cara del joven no pudo evitar levantar una ceja, así que el sería el conejillo de indias. De todas formas, mugre que no mata engorda. De un solo trago bebió dicha bebida, sintiendo de repente un gran golpe de emoción.
- ¡Demonios! Pero qué poder tiene esta cosa - exclama, pero el alemán ya se había ido. Se acercó tambaleante a la zona donde se hallaban los barriles, vaya que esa cosa le pego fuerte.
- ¡Hola! ¿Quieres que te sirva un trago? - escucho a alguien hablar a su lado, otro acento alemán pero este se escuchaba un tanto más grave que el del dictador. - ¿Zarato? ¿Se encuentra bien?
- ¡¿Que pasa hermano?! ¡prueba la margarita que hice! A Zarato le encantó
Weimar miro al ruso a su lado, llenaba tambaleante su vaso con cerveza sin inmutarse un poco respecto a quien se hallaba a su lado.
- ... bueno, dame un vaso - accede, recibiendo aquella fosforescente bebida.
Luego de tomarla sintió como su mundo parecía dar un vuelco, a pesar de estar quieto su al rededor estaba tambaleando. Ya no vio a su hermanito al lado pero el ruso seguía ahí bebiendo cerveza mientras lo veía de reojo.
- Que cosa tan extraña - comenta mientras lleva una mano a su rostro, pasándola por esta - ¿También se te puso el mundo de cabeza?
El ruso asintió lento con la cabeza, mientras más minutos pasaban más ido se sentía. Era como ver tu conciencia subirse a una canoa y dejar que se aleje lentamente con las olas mientras te quedas ahí parado sobre el muelle.
- Ugh, de verdad me pego fuerte - comento nuevamente el alemán, pasando sus manos con estrés sobre su rostro. Mirando a su lado luego de escuchar la risa del eslavo
- No aguantas nada. Yo estoy bieeeen, mírame - quiso quedarse quieto pero se tambaleó demasiado, tuvo que sostenerse del barril para no caer
- Bien idiota será - se burla, acercándose a este para ayudarle a incorporarse - Ven "viejo" te llevare a dormir
- ¡¿Disculpa?! ¿Cuál viejo? Para nosotros no aplica esos términos pues técnicamente parecemos que tenemos la misma edad
Y era cierto, ambos lucían como hombres de 30 años.
- Naciste en la época de mi abuelo, puede que no se te note pero eres prácticamente una momia
- ¿Y una momia podría hacer esto?
Sin previo aviso sostuvo al alemán de los muslos, alzándolo y haciendo que enredarse sus piernas en su cadera. Weimar por instinto abrazo el cuello del ruso, viendo asustado hacia abajo pues el tipo era un poco más alto que el Imperio Ruso.
- ¡¿Que haces loco?! ¡bájame!
- Ay lo siento, esta momia no te escucha - dice, empezando a caminar con el alemán en sus brazos hacia el segundo piso. Seguía algo tambaleante pero podía caminar, aunque claro podía sentir el susto del alemán
- ¿Se puede saber a donde me llevas?
- Los bebés a estas horas tienen que dormir - responde mientras abría una de las habitaciones que tenía el nombre de Weimar en la puerta