"¿Alguna vez tuviste ese sentimiento de que alguien te está observando?" Es lo que un soldado francés dijo a su compañero el 25 de junio de 1940 en París, Francia justo antes de terminar la batalla de Francia, las unidades acorazadas alemanas avanzaron por sorpresa en las Ardenas y a lo largo del valle del Somne, aislando y cercando a las unidades aliadas que habían avanzado hasta Bélgica para hacer frente a la invasión esperada por ese territorio, excepto unos 2 soldados que quedaron resguardados en un municipio cerca de la zona. Cuando las fuerzas británicas, belgas y francesas fueron empujadas hacia el mar por la bien organizada operación alemana BEF, y otras varias divisiones francesas, no tuvieron otra opción que huir a Países Bajos, que fue después anexada el 14 de mayo. Esos 2 soldados fueron nada más y nada menos que tú (Flavio) y tu compañero, Gerard. Estaban en un municipio destruido de París, con las calles vacías, de momentos a momentos la SS patrullaba por la zona y tenían que buscar escondite, y se les estaba lentamente acabando la comida. Tenían que pensar en un plan, y rápido... Se les agotaba el tiempo, y para empeorar las cosas Gérard tuvo una infección en el pie por una herida en la batalla de Francia. En este momento crítico, una idea apareció en ti como si fuera un tren bala golpeándote a velocidad máxima, un soldado de la SS fumando afuera de la estructura destruida en la que se estaban escondiendo menciono la firma de un importante documento en el Ayuntamiento al siguiente día, el único problema es que no tenían forma de ir, el Ayuntamiento se encontraba a media hora de viaje a pie y tendrías que arrastrar a tu compañero, ya que no puede caminar por el dolor. Antes de poder pensar algo más, la infección de Gérard empeora y no tiene buen aspecto. Está pálido, desnutrido, y con un dolor tremendo, no podía amputar ahí en medio de la nada, si no lo mata la infección el sangrado lo hará, pero tú no soportabas verlo sufrir de esa forma y morir lentamente, mientras pensabas en otras opciones Gérard te agarro firmemente de tu uniforme y te atrajo, dándote una mirada fría directamente a los ojos, que se sentía como si se tratará de mil agujas penetrando tu alma, te dice: "Los 2 sabemos que no lo voy a lograr... Solo estoy consumiendo comida y perdiendo tu tiempo. Por favor... Termina mi sufrimiento..." al terminar, te da un arma de mano, se acuesta y espera. Te quedas paralizado, no querías hacerlo, pero tú también sabias de que lo que decía era verdad, y que si no era él eran los 2, por lo que te armas de valor, dices tus despedidas y aprietas el gatillo. Nadie te escucho, ya que la SS ese día no patrullaba. Dices tus últimas despedidas, te preparas y vas en dirección al ayuntamiento con esperanzas de llegar antes de la firma. Media hora después, llegas, pero no eres el único que estaba ahí, había demasiada seguridad y protección para una simple firma, mientras estás escondido en unos arbustos, te asomas y ves a la división de protección personal de Adolf Hitler, varios oficiales de la SS y cuerpos de civiles carbonizados cerca, hay lanzallamas quemando lo poco que queda de estructuras y a los cadáveres, y la división de infantería termina con los pocos civiles perdidos deambulando por las calles que quedaban. Hoy, era el gran día, por la seguridad que había en él, haría asumiste que varios oficiales Nazis importantes estarían en esa firma, tenías que armar un plan detallado para terminar con esto de una vez por todas. Era 1 soldado Francés contra 3 divisiones de infantería, la SS y la división de protección personal de Adolf Hitler, oíste historias de esa división, ninguna con un buen final, al pensar por un rato recuerdas tu pasado como químico y científico, tantas buenas historias y recuerdos, y también recuerdas que cerca del ayuntamiento hay una estructura que parecía haber sido un laboratorio, por lo que sigilosamente de hacerlas al área y buscas por algo, cualquier cosa, no encontrabas nada, hasta que una epifanía te golpea, si mezclas mercurio con ácido nítrico y le agregas una pizca de etanol consigues mercurio fulminado, que al agitarlo con mucha fuerza crea una gran explosión, al ser un material altamente inestable y exotérmico, o sea que al agitarlo o tirarlo contra algo, hace un gran boom. La idea es perfecta, solo falta encontrar un ángulo perfecto para hacerlo... Cuando de repente tienes que parar de planear, ya que escuchas a soldados alemanes afuera del laboratorio, te preparas para disparar y esperas lo peor, pero solo estaban ahí para fumar un cigarrillo y charlar. Te alivias, te armas de valor y en un movimiento rápido con un cuchillo silencias a los soldados y los metes para adentro. Te pones el uniforme de un soldado, preparas el mercurio fulminado y te harmas de valor. ¿Qué pasaría allí adentro? No sabes Alemán, y talvez no te reconozcan, pero valdría la pena, por lo que respiras hondo, y vas en dirección al ayuntamiento, hay guardias en las puertas, adentro, y en cada esquina. Los oficiales llegarían en unas pocas horas, por lo que entras saludando débilmente con un alemán muy pobre y descubres donde estarían los oficiales. Ahora solo queda esconder el mercurio fulminado, y esperar. Todo estaba yendo a la perfección cuando aparece un soldado y te pregunta algo riéndose, no hablas Alemán por lo que te ríes nerviosamente y evitas contacto visual, pero él se da cuenta de que algo está mal, te da una segunda mirada y no te reconoce, todo está muy mal, varios soldados te están interrogando, falta tiempo para que lleguen los oficiales, y encuentran los cuerpos de los soldados alemanes que mataste, justo cuando todo el plan estaba arruinado llegaron los oficiales, y te asombras a ver al mismísimo Adolf Hitler, y otros oficiales Alemanes entrar a la sala de conferencia en la que estabas, ya era hora, si tu caes, todo el imperio Alemán también, en un movimiento rapido le disparas al Mercurio Fulminado y el Ayuntamiento explota por los aires, dias despues Alemania Nazi se rinde y la guerra termina. Francia recupera su territorio, y te reconoce como el hombre que mato a Adolf Hitler, aunque tu ya no estas fisicamente en este mundo, sigues en la memoria de la gente, como un heroe. ¿Cual es la leccion? No dejes mercurio fulminado a menores de edad.
