¿Capricho o Amor? | Mini historia (en curso)

Capitulo 3

Lia.

Al día siguiente llegué a clases y todos estaban muy callados, cosas raras que pasan pocas veces en la vida.

Me paré con mis amigas a hablar hasta que cierta rubia se paró frente a mí con una mirada de odio.

—Por tu maldita culpa Kris se fué, ¿Estás feliz? Al parecer te divertías jugando con su atención—

Ni siquiera recordaba su nombre pero sabía que era la amiga de Kristen, pues fue ella la que me envió las capturas.

—Ay nena, no te equivoques, yo solo le dí lo que quería, un poquito de atención de mi parte, que no venga un día no significa que se irá de aquí— reí un poco negando con mi cabeza.

Me llevé una sorpresa cuando me jaló la mano para pegarme a la ventana, y fruncí las cejas, fuera del instituto estaba Kristen subiendo sus cosas a un auto y despidiéndose del director.

—¿Ahora me crees? Se va por tu culpa—

Rodé los ojos ya harta y me acerqué a ella para susurrar en su oído.

—Esto no habría pasado sí tu no enviabas esas capturas, queda en tu conciencia... Yo seguiría sin saber de su existencia y ella estaría aquí aún...—

Sonreí satisfecha y me salí del salón.

Sí se va o se queda, a mí no me interesa, solo sentía bien tener alguien que subiera mi ego...

[1 año después]

Quería que las vacaciones durarán más.
Aún no estoy lista para para iniciar la carrera y vivir como adulta.

Me despedí de mi gato para salir del apartamento y bajar al estacionamiento.
Encendí el auto para empezar a conducir con calma, revisando mi cabello y maquillaje en casa semáforo. Me veía espectacular como siempre y, al ser de nuevo ingreso las miradas estarían en mi, debo dar una buena impresión, ni loca me quedo como un ser invisible en la universidad.

Revisé mi maquillaje una última vez y bajé del auto para poder entrar a la universidad.

Era enorme, y los pasillos eran confusos, estaba totalmente perdida.
20 minutos después llegué a mi destino, diseño de modas, éste es definitivamente mi lugar, el salón es enorme, está muy bien equipado. Amé todo.

Poco a poco fueron llegando más alumnos, y buscando un lugar donde ponerse, por mi parte me quedé enfrente, así veía a quienes entraban, la mayoría eran chicas, y no se veían tan desagradables, tal vez si tenga con quién platicar aquí, o será aburrido.

Entró quien creo sería nuestro profesor, tenía unos tacones hermosos con algunas brillantinas, un traje completo de saco en tono cian, y saludó muy alegre, en definitiva será lo mejor aprender aquí.
El profesor dió algunos aplausos para llamar la atención y en ese momento pasó frente a mí, corriéndo para ir a un lugar robando toda mi atención, era ella, se que lo es, ¿o se parece? Bueno, el estilo es algo diferente, pero el rostro no...

—Hey, hey, la atención al frente, mirenme a mí. Soy Samuel, su profesor, no me digan profesor ni esas cosas, me van a decir Sam, y me tratarán de tú, porque somos casi de la misma edad— bromeó un poco —Me encantaría llevarme bien con todos, pero me encanta más que hagan todo como corresponde y que me den buenos resultados, así qué, deberán dar todo de si para poder llegar a la cima, brillar y ser alguien que el mundo reconozca—

Tenía una vibra tan liberal y fresca, podría escucharlo días sin cansarme.

Luego de un rato, ya nos estábamos presentando todos y ver tantos estilos diferentes en un solo lugar me generaba emoción y curiosidad.

—Bueno, es mi turno, mi nombre es Lia, siendo sincera primero quería ser modelo, pero después lo pensé bien, las modelos no siempre pueden elegir que usar y no todos los diseñadores me gustan, entonces sería un problema usar algo que no me gusta y tener que fingir que si, entonces, elegí diseño de modas, así yo mismo crearía mi propio imperio y todo lo que use me gustaría. Mi estilo lo definiría como... Coqueto, sexy, siempre tratando de verme diva, y obviamente teniendo algo que llame la atención siempre, me gusta que me volteen a ver...—

—Lia, me encanta, tu y yo nos llevaremos muy bien, nena— me emocionó recibir un cumplido de Sam.

Era el turno de esa chica que aún me dejaba dudando.

—Mi nombre es Kristen, elegí diseño de modas inspirada en mi estilo, no veo muchos diseñadores con estilos urbanos, y me gustaría revolucionar eso, llevar el estilo urbano y minimalista a otro nivel. Está demás hablar de como definiría mi gusto, me gustan los tonos oscuros, ropa sencilla que se pueda mezclar con accesorios sin llegar a verse muy cargado...— mi boca se abrió ligeramente, si es ella.

—Kris, nena, suenas algo aburrida y depresiva, pero debo aceptar que tú idea es muy buena y que el estilo te va de maravilla, voy a aprender de tí me encanta—

Después de presentarnos todos y hablar más sobre nuestros gustos la clase terminó.

Aún me quedaba viendo a Kristen, no entiendo que fue lo que pasó en todo este año, pero ella parecía ser alguien más.