Capitulo 04

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Miré ansioso por la ventana, consciente de mi estado: embarazado de alguien desconocido alguien que probablemente no se haría cargo de esto

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Miré ansioso por la ventana, consciente de mi estado: embarazado de alguien desconocido alguien que probablemente no se haría cargo de esto. Pagué rápidamente al taxi que me había transportado hasta mi destino, deseando pasar desapercibido lleve unos lentes y una gorra oscura, tal vez que me hacia lucir mas ridículo, pero no podía permitir que alguien de la prensa me vea. Al bajar del taxi, me encontré en un lugar de casas con materiales sencillos. Caminé, observando a mi alrededor en la oscuridad de la noche, manteniendo mi situación en secreto mientras avanzaba.

—514... —murmuré mientras buscaba el número en la puerta, subía cada escalón, y los ladridos de perros me hacían temblar más.

No tarde mucho en encontrarlo y cuando lo encontre me quedé quieto, tenia miedo y senti mi corazon latir con mucha rapidez. Toqué un par de veces hasta escuchar pasos acercándose. La puerta se abrió, revelando a una señora mayor, con cabello casi blanco y una sonrisa cálida.

—Busco a alguien llamado Jungkook Jeon —dije.

—Él no está, está en el trabajo —sonrió amablemente—. ¿Pero por que lo busca?

—Es algo importante que me gustaría decirle... —comenté, sintiendo un nudo en la garganta.

—Ah, bueno, si es así, no tardará en llegar. Pero puedes esperarlo adentro si gustas —respondió la señora mayor con amabilidad.

—No quisiera molestar —dije, sintiéndome un poco incómodo ante la idea de intrusión en su espacio personal.

—Para nada, las visitas siempre son bienvenidas —dijo mientras abría la puerta. Ingresé y observé el pequeño pero acogedor espacio, limpio pero con un toque antiguo.

—¿Usted es conocido de Jungkook? —preguntó.

—Oh, no...

La señora sonrió y se sentó en uno de los sofás, ofreciéndome una taza de té.

—Me alegra que traiga a alguien a la casa, si supieras la cantidad de mujeres y hombres que lo rodean —comentó con una risa.

—Supongo que tiene lo suyo —respondí, aceptando la taza de té.

—Sí, pero siempre le digo que si va a estar con alguien, que use condón —añadió.

—Deberías recordárselo más a menudo, aveces como que se le olvida.

—¿Ya está? —preguntó ella entre risas, provocando que escupiera un poco de té— y yo pensando que seguía virgen.

—No, no, sigo siendo virgen —respondí nervioso.

—Tu no, mi Jungkook —dijo, sacudiendo la cabeza—. Es solo que es reservado.

Me quedé callado y un poco ofendido, mirando la hora en mi reloj mientras esperaba la llegada de Jeon.

—¿Sabe a qué hora llega? —pregunté, tratando de disimular mi nerviosismo.

—No tarda en llegar —respondió la señora, acomodando su taza de té sobre la mesa.

El timbre sonó, haciendo que se me erizara la piel. La señora abrió la puerta y pude escuchar el sonido de risas y voces, junto con un aroma que me resultó familiar: era el olor de un Omega, otro Omega.

—Hola... —saludó Jeon, el padre del hijo que llevaba dentro de mí.

—¿Quién es él? —preguntó el otro Omega, abrazando a Jeon.

—Vino a ver a Jungkook —respondió la señora, tomando la mochila del Omega desconocido.

Las facciones delicadas y el cabello teñido de blanco del Omega desconocido contrastaban con la situación tensa que se había formado. Ambos parecían confundidos, pero yo simplemente me puse de pie, no podía emitir ninguna oración por el nudo en mi garganta, No dije nada y empujé a ambos para salir de ese lugar.

—Tiene otro... —murmuré, sintiendo un apretón en el estómago— Tiene a otro...

—¡Espera! —Alguien tomó mi brazo y me obligó a voltear.

Golpeé su mano tan pronto como vi quién era, limpie las pocas lágrimas que había soltado.

—¡Qué mierda quieres! —Le grité, dejándolo aún más confundido.

—¿Yo? —se señaló a sí mismo— Fuiste tú quien llegó a mi casa y ahora te vas así sin más.

—Sí —afirmé, tratando de controlar mi voz temblorosa—. Estoy embarazado.

—¡¿Qué demonios quieres?! —le grité, dejándolo aún más desconcertado.

—¿Yo? —se señaló a sí mismo—. Fuiste tú quien llegó a mi casa y ahora te vas así sin más.

—Sí —afirmé, tratando de controlar mi voz temblorosa—. Estoy... estoy embarazado.

Holaaa Si lose es ta muy corto pero pido comprensión, es una de mis primeras historias

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Holaaa
Si lose es ta muy corto pero pido comprensión, es una de mis primeras historias.
Bueno me voy, ando ocupado con los estudios :'D

Un matrimonio arreglado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora